lunes, 19 de noviembre de 2012

Uniformes soviéticos reviven en Moscú el desfile militar de 1941




En Rusia, el 7 de noviembre tiene un doble y profundo significado. Por una parte evoca a la Revolución de Octubre y por otra recuerda el gran desfile militar que tiene lugar en Moscú tras la invasión nazi en 1941. Para conmemorar el primer aniversario de la Revolución de Octubre, se organiza en Moscú un gran desfile militar (desfile que se produce año tras año en la Plaza Roja).

En 1941, tras la invasión y el rápido avance alemán, Moscú es prácticamente sitiada. Mientras los invasores acechaban a las puertas de Moscú durante todo el mes de octubre de 1941, Stalin preguntaba a Zhukov sobre la viabilidad militar de celebrar el desfile del 7 de noviembre. Éste respondía “En los próximos días el enemigo no podrá realizar una ofensiva a gran escala, ha tenido grandes pérdidas y necesita reagrupar las tropas”.

En aquellos difíciles momentos, el desfile debía servir para inyectar moral al Ejército soviético. Tenía un enorme valor simbólico. 24.000 soldados tomaron parte de aquel desfile, sabiendo que en cualquier momento tendrían que volver a combatir para proteger la URSS (tenían orden de estar listos para el combate incluso en el propio desfile). En su discurso, Stalin se mostró seguro de que los soviéticos no solo defenderían su patria, sino que además liberarían también a otros pueblos. Atrevida pero profética afirmación.

El pasado 7 de noviembre, la Plaza Roja volvería a ver desfilar uniformes soviéticos para conmemorar aquel histórico gesto. Desde aquel desfile de 1941, la moral del Ejército soviético cambió. Habían perdido muchas vidas y territorio sin apenas capacidad de contener el avance alemán. Aquel gesto de desprecio hacia el enemigo y el espíritu de la Revolución de Octubre devolvían la moral necesaria para la contienda. El próximo desfile militar en Moscú, sería ya en 1945: El desfile de la Victoria.

 
 
 
 

Publicado por Cultura Bolchevique