domingo, 3 de febrero de 2013

El secreto mejor guardado del Chile de hoy ¿estás preparado? ahí va:


www.chileinforma.com
Puesta online a las 15:06, el 02 de Febrero del 2013

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En 2001 la periodista María Olivia Mönckeberg publica “El saqueo de los grupos económicos al Estado chileno” El libro no es sobre los ricos en general, ni acerca de las maneras en que empresarios privados han hecho fortuna. No trata de Agustín Edwards, Eleodoro Matte o Constantino Kochifas, hombres todos que con mucho cacumen y garra han expandido las fronteras de sus imperios, sino que sobre un nuevo tipo de especulador que valiéndose del poder político se apodera de bienes públicos. Narra cómo ciertos funcionarios de gobierno se adueñaron de las grandes empresas formadas en la segunda mitad del siglo XX por el Estado, vale decir la Compañía de Acero del Pacífico CAP, la Empresa Nacional de Electricidad ENDESA con su vasta red de generadoras y embalses, la Línea Aérea Nacional LAN con sus jugosos derechos de ruta propios de la nación, la Compañía de Teléfonos de Chile , CTC, el virtual monopolio de la telefonía, la Industria Azucarera Nacional IANSA, SOQUIMICH con todas las pertenencias mineras bajo protección del Fisco, etc., etc.

En cada caso circularon rumores, insidias infundadas decían, de que el procedimiento de privatización fue turbio, que los mismas autoridades encargadas de velar por el buen funcionamiento de dichas empresas terminaron quedándose con ellas, que los precios pagados fueron muy por debajo de su valor comercial, que Chile perdió miles y miles de millones por obra de estas “privatizaciones”, además de las almas que quedaron sin empleo y de los nuevos valores que debió costear el consumidor por sus servicios.

Pero la información concreta, específica y documentada fue siempre escasa en estos tiempos sin libertad de prensa ni periodismo investigativo. También el maniobrar de las cúpulas financiero políticas que deciden el devenir económico del chileno se ha visto facilitado por ese gran ausente que es la opinión hecha voz. Uno que otro alegato sindical, y luego, el silencio de los inocentes.

Y en medio de la batahola de los derechos humanos, el dedo apunta a la verdadera y más profunda llaga hoy, que es la de los derechos económicos. Página a página, en el frío lenguaje de los informes financieros, María Olivia, periodista especializada en economía y negocios, va presentando las auditorias, informes de Contraloría, actas de directorio, acuerdos de gabinete, pericias contables y datos de las mismas memorias anuales que van configurando el accionar concertado de un grupo de tecnócratas del régimen militar.
Es un clan muy específico de economistas, el que estudia la autora. Mirados en conjunto provienen casi todos de una clase media empobrecida, hijos de pequeños comerciantes o agricultores venidos a menos, a menudo de provincia, y en su mayoría vinculados a la Universidad Católica para luego ser becados en Chicago. Llegan con lo puesto al servicio público: amplia sonrisa, la recomendación de un amigo, y un título que lo acredita estar embebido de la ideología neo liberal de los años ’80. Al final del gobierno militar salen convertidos en multimillonarios, dueños de las principales empresas nacionales, de universidades, Isapres y Administradoras de Fondos de Pensiones, además de vastos fundos en el sur, minas en el norte y frondosos capitales invertidos en el extranjero.

La tesis central de Monckeberg es que los mentados “Chicago boys” actuaron cual banda delictual con el propósito de desarticular en su propio beneficio el aparato productivo del estado y que esos 34 “hombres decisivos” (figura una sola mujer) siguen hasta el día de hoy controlando a su gusto y amaño la economía de Chile. Por ejemplo, mientras Yuraszceck desde el ministerio de Energía privatizaba ENDESA, Piñera desde el ministerio de Trabajo y Previsión Social facilitaba que se usaran los fondos de pensiones para tal operación para luego amanecer los dos como propietarios de tamaña empresa. Roberto De Andraca, como gerente de CAP del régimen militar emprende la privatización de esa compañía con el apoyo de Hernán Buchi, entonces ministro de Hacienda, operación que fue subsidiada por el fisco y tras la cual uno quedó de Presidente del holding (accionista mayor) y el otro de Vicepresidente.

A ratos uno se pierde en la complejidad, e ingeniosa chuecura de los asaltos a propiedad pública efectuados por los modernos bucaneros. Pero la investigación de la periodista enuncia ciertos temas que quedan dando vueltas: ¿Cómo lograron doblegar a los militares nacionalistas, como el general de ejército Fernando Hormazábal, a cargo de CORFO, quien se limita a dejar constancia de su desaprobación al saqueo en el memorando para la historia que cita la autora? ¿Por qué los demás encargados de defender la integridad de la nación no hicieron nada para impedir un despojo mayor que el de la Patagonia o cualquiera de las islas y arenales celosamente defendidos?

¿Cómo es que siguen las piratizaciones de propiedad pública -sanitarias, bosques magallánicos- en gobiernos elegidos para revertir ese modelo?

Durante el gobierno de Aylwin, recordemos, se le vendieron al consorcio Trillium pedazos de Tierra del Fuego a un mil ochocientos pesos la hectárea.

¿Cuál es el rol de movimientos religiosos en la conducción económica del país?

Indica la autora las vinculaciones de los distintos personajes con el Opus Dei y los Legionarios de Cristo, pero queda por investigar el fundamento ético que imparten a sus cofrades, sobre todo en lo referido al segundo de los siete pecados capitales, la avaricia o codicia de dinero. Parecen ser, además, grupos de socialización que le brindan al joven ambicioso una red de amistades y contactos muy útiles para ascender, sobre todo tratándose de recién llegados a la gran ciudad.

No olvidemos que las sectas se caracterizan por la creencia de ser los mejores, entonces es natural que los miembros de estos clubes de mutua admiración privilegien a los suyos por sobre quienes postulan por concursos abiertos de mérito profesional.

Curiosamente, muchas de las privatizaciones no fueron para crear en el país un sector privado fuerte, sino para terminar traspasando empresas del Estado chileno a otros Estados, como es el caso de CTC, y Endesa que ahora pertenecen al gobierno español. El puro traspaso de Endesa al monarca peninsular le reportó, asegura la obra, más de 500 millones de dólares a Yuraszeck y sus cómplices.

¿Será la historia que se repite?. O’Higgins, San Martín, Manuel Rodríguez, los padres de la patria se alzaron en armas para hacer de Chile una nación soberana, dueña de su destino.

EL SAQUEO DE CHILE 
por Pablo Huneeus 

Si la mitad de lo que denuncia María Olivia Monckeberg en su libro “El Saqueo de los Grupos Económicos al Estado Chileno” (Ediciones B, 270 páginas, $4.500.-) es cierto, entonces Buchi, Carlos Cáceres, Brunno Philippi, Joaquín Lavín, José Piñera (hermano de Sebastian Piñera ), Julio Ponce Lerou, Alvaro Saleh(dueño de La Tercera), Yuraszeck y demás protagonistas de la magna obra serán pronto llevados al paredón. 

En la oportunidad, la profesional hizo una detallada exposición del periodo comprendido entre 1985 y 1990, donde mencionó los procesos privatizadores de CAP, ENDESA, SOQUIMICH, Chilectra, ENTEL y el Instituto de Seguros del Estado. 

Privatizaciones sin un congreso fiscalizador 

Monckeberg inicia su investigación a partir de su experiencia como reportera en el sector económico desde 1973 en adelante. Desde ahí da cuenta de la falta de transparencia que existió en el proceso privatizador, debido a la falta de libertad de prensa, a la inexistencia de un Congreso fiscalizador y de la escasa independencia del Poder Judicial. 

Asimismo, sostiene la tesis que existió un ablandamiento ejercido por los economistas de la época -los Chicago Boys- a las fuerzas militares que regían el país, quienes hasta entonces concebían a las empresas del Estado como estratégicas. 

María Olivia Monckeberg señaló que existió un sustento legal que permitió la privatización, y afirmó que la misma red de poder que se fue conformando en esa época, continúa vigente hasta ahora en el país. 

Esto dio paso a la aparición de grupos económicos nuevos que crecieron y se desarrollaron al amparo del Gobierno Militar y de las estructuras sociales. En este ámbito, destacó a ex funcionarios civiles y miembros del Gabinete de régimen de Augusto Pinochet, y a ex dueños de empresas privatizadas, que continúan ejerciendo cargos en directorios y como dueños de empresas en los más diversos ámbitos, pero concentrando cada vez más el poder económico. 

La periodista sostuvo que tituló su libro El Saqueo de los grupos económicos porque se generó en Chile un notable traspaso de poder económico en el que pasaron del Estado a manos privadas miles de millones de dólares. 

Hizo mención a que este proceso se mantuvo fuera de la esfera informativa, principalmente debido a la relación de los grupos económicos y los medios de comunicación, lo que se tradujo en que su libro, publicado en 2001, no haya sido comentado en diarios como El Mercurio y La Tercera, lo que contrasta con las cifras de ventas que obtuvo. 

IMPULSO CON BUCHI 

El proceso privatizador investigado por Monckeberg se inicia en 1985, cuando Hernán Büchi asume el Ministerio de Hacienda. Desde esa fecha, explica, Chile inicia una fase más radical que el resto de Latinoamérica, incluso más aún que el de la Inglaterra de Margaret Thatcher. 

Las ventas, afirmó la periodista, se realizaron a puertas cerradas, con legislaciones ad-hoc, y beneficiando a los privatizadores, quienes contaron con información privilegiada. 

Se utilizó también el capitalismo popular, que cumplió un doble objetivo de permitir a los privatizadores contar con recursos y créditos, y aplazar las tímidas críticas del movimiento sindical de la época. 

YURASZECK MAESTRO EN LAS SOCIEDADES DE PAPEL 

Un caso emblemático presentado por la periodista fue el de Chispas I y II, y de su gestor José Yuraszeck (hoy dia accionista y dirigente del club de futbol universidad de Chile ), quien, de simple funcionario de ODEPLAN a fines de los 70, pasó a transformarse en el “Zar de la electricidad”, gracias a la privatización de Chilectra y ENDESA. 

Cuando Chilectra se privatizó, se dividió en Chilmetro, Chilquinta y Chilgener. Yuraszeck se centró en Chilmetro, que luego se convirtió en ENERSIS. Yuraszeck fue uno de los maestros en la creación de sociedades de papel diseñadas para lograr el control de las empresas que se privatizaban a través de este denominado capitalismo popular, afirmó María Olivia Monckeberg. 

En julio de 1987, se constituyeron Chispitas I y II, donde los trabajadores aportaron con un 20% y los ejecutivos un 2% del capital. Esta garantía les permitió acceder a créditos con el Banco del Estado por un valor 10 veces mayor. 

Chispitas se asociaron con otras 2 empresas de papel: “Luz y Fuerza” y “Los Almendros”. Cuando culminó la privatización en 1989, asumió como presidente el ex Ministro José Piñera. Junto a Yuraszeck, tomaron el control de ENDESA. 

Al momento de la privatización, la compañía manejaba el 60% de la generación eléctrica del país y casi la totalidad de los derechos de agua. En la Región Metropolitana, informó Monckeberg, la generación y distribución de electricidad quedaron en las mismas manos. 

A la vez, dio cuenta de un informe de Contraloría de 1991, que explicaba que la privatización de esta empresa le costó al país U$ 1.000 millones. 

EX MINISTROS A LOS DIRECTORIOS DE LAS EMPRESAS PRIVATIZADAS 

La periodista graficó ante la comisión otros procesos privatizadores, relacionando a ex ministros del Gobierno Militar, como los titulares de Hacienda Hernán Büchi, Sergio de Castro y Carlos Cáceres, que presidieron posteriormente directorios de empresas privatizadas, con los ejecutivos que llevaron a cabo estos procesos, como Juan Hurtado Vicuña (Chilquinta), Bruno Filippi (Chilgener), Julio Ponce Lerou (Este tipo es ex yerno de Augusto Pinochet, durante la dictadura le encargaron administrar la sociedad química y minera de Chile, SOQUIMICH ¿y que hizo el lindo?¡termino quedándose con ella! hoy es uno de los hombres más ricos de Chile , pero su nombre nunca es mencionado por los medios ¿o tú crees que teletrece hará un reportaje sobre esto?), José Yuraszeck y Alvaro Saieh. 

“El saqueo de las grandes empresas públicas quedó instalado antes de que Pinochet se fuera de La Moneda” 

MARIA OLIVIA M. 

PRIVATIZACIONES Y GRUPOS ECONÓMICOS 

Extracto de una entrevista de Maria Olivia Mönckeberg 
Por Patricia Bravo 
Punto Final (octubre 2009) 

“Por cierto. Uno podría pensar que el sentido último de lo que el régimen militar quería perpetuar pasa por la implantación de este nuevo modelo socioeconómico que abarca todos los ámbitos de la vida de las personas, y que a la vez es la nueva salida de la derecha en Chile. El hecho de haber reporteado desde el comienzo para una revista semanal, tratando de entender lo que estaba pasando en ese ámbito, me hizo seguir una pista sin que me lo propusiera. Fui observando, indagando y también tuve la oportunidad de conocer gente muy interesante, economistas y políticos que estaban en la oposición, como Radomiro Tomic, Alejandro Hales y Eduardo Frei Montalva. Tuve largas conversaciones con Aníbal Pinto Santa Cruz, por ejemplo. Recuerdo haber analizado muchas veces la distribución del ingreso con Ricardo Ffrench-Davis. Además, pude estar alerta respecto de lo que ocurría en otras partes en materia de periodismo, aunque todo el período de la dictadura lo pasé en Chile . Tuve la posibilidad de ir a EE.UU. después del caso Watergate, a un seminario de periodismo de investigación. También pude conocer el tipo de periodismo que se hacía en Europa. 

Por otra parte, tengo la costumbre de llevar archivos, seguir los temas y anotar lo que me llama la atención. Y también hay hitos. Al seguirle la pista a la economía vi cómo se fueron formando los grupos económicos en su etapa inicial, con las primeras olas privatizadoras. Por ejemplo, el de Manuel Cruzat y Fernando Larraín Peña. También seguí estudios sobre estos temas y escribí artículos sobre eso. Me parece que el primer reportaje que hice en Análisis fue sobre el nuevo sistema previsional, en combinación con Patricio Rozas. También una investigación económica sobre el caso Crav, que reventó en 1981. Eso era ya periodismo de investigación”. 

-¿Por qué ha orientado sus investigaciones a centros de poder, como los grupos económicos, Opus Dei, universidades? 

“Creo que tiene que ver con mostrar y develar lo que ocurre en los poderes fácticos, en los enclaves que limitan la democracia”. 

Esos poderes fácticos no siempre son reconocidos como tales. 

“Por eso hablo de develar, levantar los velos, sacar las cortinas, mostrar. En relación a esto me sobrevino la inquietud por el tema de las universidades, cuando en 1987 estalló la crisis de José Luis Federicci, rector delegado de la Universidad de Chile nombrado por Pinochet. Quise investigar directamente lo que ocurría, y en parte por eso dejé la revista Análisis. Me empecé a juntar con gente de las dirigencias estudiantil y académica, y fui atando cabos. 

Personas a las que había seguido desde el punto de vista económico, porque estaban al frente de las privatizaciones de las empresas del Estado -que todavía no podían materializar, porque había crisis económica-, aparecieron formando comisiones sobre la política universitaria. Fue el caso de Bruno Phillippi, José Yuraszeck, Alvaro Saieh, Sergio Melnick. Esa relación me llamó la atención. Eran personas con mucho sentido estratégico. 

¿Estaban preocupadas de la energía, de las empresas eléctricas, y a la vez de qué hacíamos con las universidades? 

Siguiendo este hilo empecé a darme cuenta que no los movía sólo una inquietud económica, sino hacer que los cambios que se estaban produciendo fueran perdurables. 

En mi opinión, eso se hizo más evidente cuando ya se había generado la movilización social y las grandes protestas de los años 80. Creo que percibían que la dictadura iba a tener fin, cualquiera fuera éste, y estaban preparando sus caminos. Parte de esos caminos era destruir la Universidad de Chile y la Universidad de Concepción, entre otras. Se disponían a hacer el gigantesco traspaso económico de los recursos del Estado a grupos privados. Y como los grupos privados más tradicionales se habían desmoronado, había que reconstruir otros para que llevaran la batuta cuando Pinochet ya no estuviera instalado en La Moneda. En la medida en que iba percibiendo estas relaciones, más me interesaba el tema”. 

Y al descubrir los nexos, un tema la fue llevando al otro… 

“Exactamente. Algunos los dejé en barbecho por distintas razones, pero después los he retomado. La primera motivación que sentí en 2001 fue lanzarme con el libro sobre la privatización de las empresas, El saqueo de los grupos económicos al Estado chileno. Después retomé el tema de las universidades y entre medio hice el libro sobre el Opus Dei. Son temas bastante relacionados. La gente creía hasta hace algunos años que el Opus Dei se trataba de algo netamente religioso. Y lo es, pero con una notable influencia y poder en la sociedad, tanto en términos educacionales como empresariales”. 

Entre las patas de los caballos 

Si retomara el tema de los grupos económicos y la evolución que han tenido bajo los gobiernos de la Concertación ¿qué aspectos enfatizaría? 

“El saqueo, el traspaso a manos privadas de las grandes empresas públicas, quedó instalado antes que Pinochet se fuera de La Moneda. Quedó ese terreno sembrado. Voy a retomar este tema para actualizarlo. Lo notable es que hasta ahora no ha habido marcha atrás. Los grupos que se gestaron al amparo de la dictadura, con prebendas del régimen militar, siguen siendo tremendamente significativos. Los que aparecen en El saqueo continúan avanzando en gloria y majestad en otros sectores de la economía, vinculándose con la educación superior, la salud, el sistema previsional. Falta en Chile un Estado más activo. La crisis económica mundial ha mostrado que hay muchas cosas a las que hay poner coto. Si queremos una sociedad más equitativa y que no se mantenga esta enorme estratificación social que tenemos hoy, debería haber un rol más activo del Estado, una mejor distribución de las utilidades, más fiscalización y mayores posibilidades de diversidad”. 

En todo caso se habla mucho de que se requiere ‘más Estado’. 

“Lo que a mí me gustaría saber es ‘cómo’ más Estado. ¡Es tan importante lo que se podría hacer si hubiera una mayor toma de conciencia de las limitaciones! Partiendo por el rol de los medios de comunicación, de los espacios públicos para debatir. Por más que la gente crea que goza de mayor libertad porque tiene muchos sitios de Internet para visitar, yo tiendo a ser escéptica. Si bien a través de Internet se pueden gatillar fenómenos interesantes, se requieren espacios más amplios. En el caso de los medios, faltan espacios de papel, espacios de televisión abierta y ojalá espacios de televisión digital realmente democráticos, y no que se repartan la torta entre los mismos de siempre. En los medios de comunicación la relación con los grupos económicos es muy fuerte”…. 

¿y qué hay de los medios de comunicación? ¿También están “con las manos limpias”? la actual situación de concentración en la prensa escrita fue producto del salvataje que le dio el Estado al final de la dictadura, por medio de personeros muy interesados en que el poder de la prensa quedara en manos amigas, a las dos cadenas que hoy copan el mercado: El Mercurio y Copesa. 

Ambas, gracias a la censura impuesta por la dictadura, no tuvieron competidores por años, pero contrajeron importantes deudas modernizando sus instalaciones y sus procesos. Para la crisis del 82, las deudas de Edwards llegaban a cien millones de dólares. Y mientras cientos de empresas quebraban, el régimen salvaba a El Mercurio entregándole 53 millones de dólares en créditos a través del Banco del Estado. Muy importante en esta y en las transacas que vinieron -traspaso de acciones de El Mercurio S.A.P. al Banco del Estado, renegociación de la deuda a quince años con intereses excepcionalmente bajos, opción de rematar deudas, “permutas” de créditos e importantes inversiones del Estado en publicidad para el decano- fue, nada mas ni nada menos, Jovino Novoa, quien al salir de la Subsecretaría General de Gobierno llegó como editor general de informaciones a El Mercurio y trabajó con Edwards para sanear las platas. 

Copesa, por su parte, estaba en esos años en manos de Gonzalo y Germán Picó Domínguez y adeudaba 1.137.742 UF. Para salvarla, el Banco del Estado se quedó con el 70% de las acciones de Malán Inversiones S.A., principal accionista de Copesa. Y luego se las vendió a Álvaro Saieh, Carlos Abumohor y Alberto Kassis, todos amiguis del régimen, en sólo un tercio de la deuda original. Todos los movimientos para realizar este rescate, incluidas las polémicas “permutas” de créditos que vinieron después, significaron una pérdida de 273.503 UF para el Banco del Estado. 

Terminada la dictadura, el duopolio se ha llevado gran parte de la publicidad, pagada en la mayoría de los casos por sus contactos en las cerradas redes del poder económico. Los medios nacidos en dictadura, como el diario La Época, han muerto, lo mismo que gran parte de los proyectos que han nacido en los años posteriores. Hoy, el duopolio se lleva el 82,7% de la venta de diarios. 

¿Y tú crees que en Chile hay Democracia? 

Piensa en esto: Cuando veas hablar en TV a los políticos del profundo amor que sienten por Chile y de las cualidades republicanas de este país, cuando veas a los políticos dar discurso con la bandera de fondo y al mismo tiempo obligan a los niños a cantar el himno nacional todos los lunes por la mañana, piensa en lo que acabas de leer. 

FUENTE: 

“El saqueo de los grupos económicos al Estado chileno” María Olivia Mönckeberg 

Entrevista A María Olivia Mönckeberg por Patricia Bravo 

“El saqueo de Chile “ por Pablo Huneeus

Marx, sus continuadores y la izquierda


por Paula Vidal Molina


Así como un centenar de años han visto acumular una extensa bibliografía para dar cuenta de las cíclicas crisis del marxismo, después de 150 años, la obra de Marx y Engels, es un clásico donde se ubican claramente elementos de comprensión del presente. La vigencia de sus pensamientos tomó nuevos bríos, especialmente después de la crisis económica desencadenada a partir del año 2008, que llevó a personas de todo el mundo a buscar El Capital en librerías y bibliotecas, con el interés de encontrar en este texto, claves de comprensión de la sociedad contemporánea. Todos sabemos, que al poco tiempo, la prensa mundial desde Nueva York hasta Tokyo, hablaba de que Marx era elegido uno de los grandes pensadores de todos los tiempos. Y ¿cómo dudar de ello al adentrarse en sus obras?, sus estudios al dar cuenta, por ejemplo, del capitalismo como un sistema irracional, anárquico, que vivencia ciclos de crisis permanentemente, que adquiere un carácter mundial, que genera y requiere de un ejército industrial de reserva, que las relaciones sociales entre personas pasan a ser mediadas por el intercambio entre cosas, o del papel del crédito como medio para compensar las cuotas de ganancias, entre otros aspectos, anticipan algunos de los trazos que caracterizan la sociedad capitalista en la actualidad.

Por mucho tiempo pensamos que se había dicho todo de Marx y Engels, pero las actuales investigaciones hablan de que existen nuevos manuscritos en alemán que ayudan a entenderlo de una manera más completa, la edición Mega 2 es imprescindible para ello (1). En español se requiere editar y reeditar obras que permitan completar las publicaciones existentes. Aquello, es un desafío importante que favorecería el regreso de los textos de Marx y Engels en librerías para ofrecer la obra completa a las nuevas generaciones.

De la obra marxiana conocida, es sabido que, aun con sus anticipaciones geniales, no podían ir más allá de su tiempo histórico y entregarnos elementos de comprensión para todos los problemas de la actualidad. Sin embargo, sus continuadores, han desarrollado también muchos aspectos nuevos, emanados de las contradicciones del movimiento socio-histórico. Los seguidores dieron forma a un campo marxista surgido desde fines del siglo XIX, donde se configuraron tradiciones diversas en su interior, que, así como enriquecieron las contribuciones de Marx, también las autolimitaron. Entre algunas de estas corrientes podemos mencionar el austromarxismo, el marxismo occidental que inauguran obras como las de Lukács y Korsch, el marxismo de Antonio Gramsci y Walter Benjamin, dos pensadores entre los más estudiados hoy en el mundo, el marxismo-leninismo, el marxismo de Mariátegui, el de la escuela deFrankfurt, el de la escuela de Budapest, la corriente trotskista, la maoísta, el marxismo existencialista, el althusseriano, el marxismo delChe, de la teoría de la dependencia, el marxismo de la teología de la liberación, el marxismo analítico y el marxismo político con figuras como Hellen Wood o Robert Brenner, y cada una con sus propios matices y debates, lo que demuestra que la herencia marxista es abierta, plural y responde –de peor o mejor modo- a las tensiones y desafíos que colocan las nuevas contradicciones socio-históricas.

La sociedad contemporánea da señales de una crisis estructural del capitalismo, que a diferencia de las crisis del pasado, en la actualidad se manifiesta como universal y de impacto global que pone en riesgo la sobrevivencia del planeta. Hoy, más que civilización, el sistema capitalista ofrece barbarie para el mundo, y ello se expresa de múltiples modos, por ejemplo, a través de las crecientes desigualdades entre países y al interior de estos, la hambruna de poblaciones que coexiste con la producción en abundancia, la precarización del trabajo y el desempleo estructural, la acción de los Estados que interferidos por intereses económicos, entre otras cosas, desmantelan derechos ciudadanos universales, incrementando ayudas asistenciales y focalizadas para reducir y controlar la pobreza, o aumenta los obstáculos para la inmigración hacia los países centrales. Las brutales guerras son otra expresión de la barbarie ya que, a la vez que movilizan la industria de armas y el crecimiento económico, se justifican en nombre de la libertad, la democracia, la lucha contra el terrorismo, el narcotráfico y la estabilidad social, y por causas humanitarias, escondiendo intereses de dominio geopolítico o económico, todo esto amparado por una firme alianza entre grupos dirigentes del Estado y capitales, que, en otro ámbito, viene siendo exitosa para los intereses de las transnacionales porque se permite sobreexplotar y controlar en pocas manos las riquezas naturales. Pero es nefasta para el conjunto de la humanidad debido a los altos niveles de contaminación y al agotamiento de las fuentes de recursos naturales, todo lo cual impacta creciente y negativamente sobre la biosfera. Lo anterior, son algunas señales que apuntan a mostrar que esta formación social no asegura el desarrollo y la emancipación para la humanidad, y que contiene la tendencia para llevar a la autodestrucción al planeta. Con todo ello, el marxismo sigue contando con un objeto para analizar, y generar una crítica radical al capital. Pero, a la vez, puede aportar a crear alternativas globales que bosquejen un nuevo orden social.

La incipiente revitalización de los movimientos sociales desde mediados de los años 90, y que adquiere mayor fuerza después del 2000, pone temas que parecen mostrar el camino para superar las limitaciones de las organizaciones colectivas de viejo cuño en todo el mundo. En Chile, han sido las movilizaciones de trabajadores del cobre, de las forestales, de la pesca, del Estado, de los ciudadanos de las regiones de Punta Arenas, de Aysén, de Calama, de los pobladores sin techo y del pueblo mapuche, entre otras, las que han mostrado la necesidad de organización y lucha por demandas sociales. Pero especialmente ha sido la movilización de los estudiantes, la que ha marcado el punto más alto en los últimos años, de ascenso de la crítica al neoliberalismo y ha puesto nuevamente a Chile en el escenario internacional, como un ejemplo de creatividad y organización, y de que las promesas de inclusión, integración y equidad no fueron posibles de realizar bajo el neoliberalismo. Los movimientos sociales, al levantar sus demandas y caminos a seguir, además de nutrirse del sentimiento de injusticia que vivencian, requieren teorías potentes para analizar y transformar su mundo. En esta tarea, si bien el marxismo no otorga todos los análisis y respuestas, es imposible prescindir de él si es que se quiere realizar una crítica a la raíz del orden social capitalista.

Recordemos que Chile fue conocido mundialmente gracias al proceso cristalizado por la Unidad Popular, el cual contó con la inserción del marxismo en la discusión académica y en la organización político-social. Hoy, vuelve a ser nombrado internacionalmente por la esperanza de transformación social que abren las nuevas generaciones, y en este contexto, los marxismos en el siglo XXI se enfrentan al desafío y la urgencia de ofrecer claves de interpretación y contenidos teórico-políticos a este proceso social, que esperamos, pueda construir un Chile profundamente democrático e igualitario.

Por Paula Vidal Molina
Doctora en Serviço Social Universidade Federal de Río de Janeiro. Académica Universidad de Chile.
(1) Ver “Tras las Huellas de un Fantasma: la actualidad de Karl Marx” de Marcello MustoSiglo XXI. 2011.

Dagoberto Gutiérrez (comandante FMLN): "Las campañas electorales han dejado de ser acontecimientos políticos, para convertirse en eventos mercantiles y en estos eventos mercantiles los partidos políticos negocian una mercancía, “la política”.


enero, 2013   Voces

   

Dagoberto Gutiérrez, líder del Movimiento Nuevo País, valora el rumbo que podría llevar el país durante este 2013 en política, ya que es un año pre electoral, al mismo tiempo se refirió al proceso que tiene el Nuevo País en el Tribunal Supremo Electoral.

Dagoberto Gutiérrez
Redacción Voces

¿Cómo valora en año 2012 para El Salvador y sus perspectivas en este 2013, año electoral si tomamos en cuenta  que las elecciones se realizarán febrero del 2014?

Los años 2012 y 2013 son, dentro del proceso político salvadoreño, dos momentos diferentes, pero que a la vez expresan una continuidad. El 2012 fue un año de concentración de las contradicciones, un año del crecimiento al maltrato a los seres humanos y a los intereses de ellos, de concentración de la fuerza y el poder del capital internacional y de los partidos políticos tradicionales en contra de la gente. Año de despliegue de la crisis histórica del país.

El 2013 se espera que sea el año del despliegue de la resistencia, del reclamo, de la protesta, de la indignación y de la propuesta política. Esto no depende de la campaña electoral, es más, la campaña electoral depende de lo anteriormente dicho. Las campañas electorales han dejado de ser acontecimientos políticos, para convertirse en eventos mercantiles y en estos eventos mercantiles los partidos políticos negocian una mercancía, “la política”.

Política como mercancía que será influenciada por esta crisis histórica que vive El Salvador, la sociedad salvadoreña.

¿Cómo enmarcar en este contexto el partido Movimiento Nuevo País (MNP)?

En la confrontación entre partidos políticos tradicionales y la sociedad salvadoreña se inscribe la aparición del Partido Movimiento Nuevo País. Nacemos y nos formamos en las alas y en el viento de esta crisis, somos fruto de esta crisis y esperamos ser capaces de contribuir a la organización del movimiento social y los movimientos políticos como comunidades organizadas políticamente. Haciendo política y participando en política como dos momentos diferentes, fuera de los partidos políticos y de la política.

¿Todo este trabajo gigantesco va a influir en la campaña electoral? Sí, porque nosotros buscamos “ensuciar” lo electoral con lo político. En el mundo de hoy lo electoral busca matar lo político, degollar lo político, cuando lo que se trata es de cubrir la campaña electoral con lo político. Lo político se convierte en algo que disocia lo electoral. Esto expresa la crisis contemporánea.

Dagoberto Gutiérrez manos

¿Avala entonces que el Movimiento Nuevo País participará en la Campaña electoral?

El trabajo que nos proponemos solo se puede hacerse dentro de la campaña electoral, no desde afuera. Claro vamos a trabajar desde afuera, pero desde adentro de la sociedad y desde la sociedad. Pero como dije también vamos a trabajar dentro de la campaña electoral.

Ahora. ¿Cómo estar adentro de la campaña electoral?  Esto requiere legalidad.

¿Cómo estar dentro de la sociedad? Esto requiere legitimidad.

Para el movimiento político la clave es la legitimidad, pero para el partido político la clave es la legalidad. Por eso estamos en trámite  de las firmas y todo el proceso de inscripción del nuevo partido.

¿Cómo marcha este proceso de inscripción del MNP?

Tenemos hasta febrero para presentar los libros al Tribunal Supremo Electoral. Necesitamos 50 mil firmas como mínimo. No es un camino fácil, es difícil. Nuestra actividad no es basada en el dinero, es basada en el apoyo real de la gente, a esto le apostamos.

¿Legalizado el MNP, su posibilidad se basa en la participación en solitario, en alianza con otros partidos políticos?

Eso dependerá de las condiciones concretas, siempre es así. El MNP tiene un corazón político, no tiene un corazón ideológico. Los seres humanos miramos la realidad y la entendemos, la saboreamos de manera ideológica. Pero en este caso es un corazón político. Reconocemos los diferentes intereses y las diferentes ideologías de los diferentes sectores que integran una sociedad, como las hormigas en un hormiguero.

Estamos abiertos a acuerdos y alianzas que mejoren la correlación de fuerzas. Esos acuerdos y entendimientos o alianzas dependerán del momento específico y de la toma de decisiones. En rigor teórico yo puedo hacer una alianza con mi enemigo si el momento lo exige y es posible, por eso puedo tener un aliado no confiable y un aliado confiable. Un aliado permanente y un aliado temporal. Así es la política, hoy hasta la matemática  es diferente y en el mundo de la nanotecnología dos y dos ya no son cuatro, son nueve.

Dagoberto Gutiérrez 3

¿Abiertos entonces a cualquier alianza?

Hay alianzas que jamás se hacen, son alianzas que jamás se tocan, pero hay otras que sí.  Esas que jamás haremos no las tiramos a los cuatro vientos. La lucha política no es como la relación entre el día y la noche. La noche duerme con el día.

Analistas del tema salvadoreño ven en la participación del MNP, la posibilidad de restar votos al FMLN. ¿Cómo valora esta posibilidad?

No buscamos esto y no buscamos la integración del MNP a partir de gente que provenga del FMLN. No queremos eso. Lo que ocurre es que en la vida hay cosas que pasan sin que uno se lo proponga y ciertamente hay en estos momentos mucho malestar, sinsabor, mucho desengaño de militantes de este partido. Es un fenómeno inevitable que si nosotros participamos en la votación haya gente que antes votaba por este partido, ahora deje de hacerlo.

Por ejemplo en la elección anterior una parte de la gente votó por el FMLN, pero otra parte votó por Mauricio Funes y otra parte votó contra ARENA. Fue una votación multicolor.

En este momento de desprestigio total  de los partidos políticos, su fuerza tiende a ser ilusoria. Para nosotros ARENA nunca ha salido del gobierno. La política del gobierno de Mauricio Funes es la misma de los anteriores gobiernos de ARENA. La economía de ARENA, la Política educativa de ARENA, el alineamiento internacional de ARENA. Si algo tiene claro Funes es su sometimiento a Washington, igual que ARENA.

¿Este es un Gobierno de izquierdas? No, es un gobierno de derechas. Y la cúpula del partido FMLN es de Izquierdas? No, es una cúpula de derechas. Es una cúpula de millonarios, constituyen la nueva burguesía.

El proceso histórico del país conforma una situación suigeneris.  Hay un desdibujamiento de la clase dominante y una crisis de la clase dominante. En la cúpula de ALBA Petróleos está surgiendo una clase social, está naciendo una burguesía.

Una persona no tiene la suerte de asistir al nacimiento de una clase social todos los días, como no tiene chace de ver el nacimiento de un volcán. Así vemos nosotros el nacimiento de una clase burguesa. Las condiciones materiales de existencia determinan la conciencia, cosa monumentalmente válida. La cúpula de derechas se maneja como de izquierdas, igual que el gobierno de derechas se maneja como de izquierdas.

Esto trae a sus militantes y simpatizantes  mucha incertidumbre en sus cabezas y mucho sufrimiento.

Dagoberto Gutiérrez 2

¿Cómo valora en estos marcos la posible o casi segura participación de Antonio Saca en las elecciones?

La importancia política de Tony Saca depende de la dimensión en que su pensamiento se aleje de ARENA. Si permanece su cabeza en los límites de ARENA, entonces su propuesta valdrá muy poco. Históricamente un proyecto de Saca tendría valor si es un proyecto burgués, porque el problema de ARENA es que su proyecto es oligárquico, no ha existido en el país un proyecto de la burguesía, por eso es que en El Salvador no funciona ni la más mínima regla de la democracia burguesa, ni la alternancia pasa, para los oligarcas la alternancia es comunismo puro, siendo a la vez increíble que la cúpula del FMLN sea comunista.

Si Saca expresa la posibilidad de un proyecto burgués se estable mejor la confrontación de dos proyectos de derechas; pero la naturaleza de su proyecto está pendiente, no lo sabemos y tampoco sabemos cómo va a participar.

Si entendemos la probabilidad de su participación, una persona muy lista y capaz, con mucha capacidad de movimiento. Es el enemigo real de ARENA, partido al cual no le preocupa mucho la candidatura de Sánchez Cerén; sino Saca, y creo que tienen razón, es muy probable que la cúpula de ARENA este más lejos de Saca, que Saca del Partido ARENA.