martes, 21 de octubre de 2008

PERÚ - ¿Maquillando a la crisis?


Javier Diez Canseco, "La República" (Perú)

La desbordante corrupción, el chuponeo, el malestar militar y el malestar social ante la inflación y la crisis económica irresponsablemente negada hicieron tambalear al gobierno y sus alianzas. Viejo mago ilusionista, García jugó sus cartas para un cambio sin cambio. El "chuponeo" desnudó –con voces y caras conocidas– la amplitud de la corrupción en las alturas del poder, notoria desde el fracaso del "shock de inversiones" al inicio de este gobierno. Soltó, con gotero, información que comprometía a presidentes, directores de empresas públicas y ministros. León Alegría, amigo y ex ministro de Alan García, de conocido prontuario arreglado con los jueces fujimoristas, puso en escena al mismo Presidente. Y es que, como Mantilla, es de los alanistas que salen y entran al APRA cuando conviene, pero siempre anda en el cogollo de los operadores íntimos.

También sacó cabeza un poderoso aparato de inteligencia política: interceptación de teléfonos e internet de alta calidad, trabajo profesional y prolongado (conversaciones de ocho meses), objetivos bien escogidos. Jaqueó al gobierno: con lo que mostró y lo que insinúa podría mostrar. (¿Quiénes? Los aparatos de chuponeo del fujimontecinismo nunca "cayeron". ¡Las FFAA y PNP negaron tener equipos! Y crecen como hongos las empresas privadas de seguridad –¿y seguimiento y espionaje?– formadas por militares retirados, como Forza que trabajaría nada menos que con Petro Tech).

¿No manifiesta el chuponeo malestar en las FFAA y presión fujimontesinista ante la sentencia al capo-chino (o la lucha por el petróleo)? Las FFAA padecen sueldos miserables, recorte presupuestal, huelga de los trabajadores civiles, quiebra de la Caja Militar Policial. No son los únicos, pero otros no tienen su incidencia en el poder. El juicio está al borde de la sentencia. ¿No fue el discurso de Alan en el aniversario de Grau, llamando a cesar la persecución a los "salvadores de la patria" por temas de DDHH (imputaciones de ejecuciones extrajudiciales de civiles en una operación militar en Vizcatán, constatadas por el informe del Instituto de Medicina Legal), un mensaje a quienes pueden haber soltado los audios? ¿No negocia la impunidad de algunos –ajenos a la conducta de Grau– a cambio de aceptar un presupuesto recortado y una sentencia benigna o indulto? La salvaje emboscada de terroristas provenientes de Vizcatán, asesinando militares y civiles, muestra que salieron indemnes.

La crisis política exigiría enfrentar la corrupción y el rebrote del militarismo y el senderismo. ¿Cree usted que García está en lucha a muerte contra la corrupción, como dice Simon? ¿Podrá Simon hacer algo, más allá de su honestidad personal, con allegados como Remigio Morales B.? Hasta ayer era parte de los "ineptos presidentes regionales" que ni podían invertir su presupuesto. No tiene partido, ni equipo, ni parlamentarios. ¿Controlará el insaciable protagonismo de García, la demanda partidista, las presiones fujimoristas y de la derecha cavernaria? ¿Crecerá como candidato? ¿O repetiremos la tragicomedia de un Valle Riestra "domador" de Fujimori? Pero si viene un descalabro final, será el fracaso de la "izquierda", aunque no tenga arte ni parte.

Se necesita, más que cambio de personas, un cambio de rumbo. Otras políticas, otro manejo del Estado y la política, desprestigiada y podrida. Democracia participativa, control ciudadano, fiscalización preventiva. Frenar la inflación, beneficiarnos de nuestros recursos naturales (hoy concesionados por migajas), terminar con los privilegios tributarios de transnacionales y grandes empresas, cobrarles lo no pagado. Crear un fondo de anticrisis, apoyo al agro y Mypes, y una reforma tributaria que redistribuya la riqueza. Estrategias de desarrollo regionales basadas en los recursos en cada localidad –empresas, mercados, técnicos– y naturales; ese ’autocentramiento’ que propone Jürgen Schuldt. Toledo y García dejaron pasar los años de crecimiento sin priorizar la inversión en el desarrollo humano: educación, salud.

A lo señalado se agrega el huracán económico internacional y la absurda locura alanista del blindaje. Los precios de nuestras exportaciones mineras se desploman (la libra de cobre bajó de $4 a $2.20). La demanda de EEUU y Europa caen. También los precios del petróleo y agrícolas (75% en cuatro meses los granos para biocombustibles). Cae la demanda de textiles en el exterior (¡y la ratificada ministra Aráoz quiere un TLC con China!, ¿para ahogar lo poco que queda en este ramo sin TLC?). Caerá la recaudación tributaria del Estado, el canon y las regalías para regiones y municipios. Ya están recortando el presupuesto. Más grave aún, una sequía de crédito internacional paralizará las muchas anunciadas inversiones. Viene una recesión y un hachazo al gasto social. ¿Lo enfrentará Yehude con el mismo equipo económico (Valdivieso-Aráoz)? Sí, ya lo dijo.

¿Habrá cambio? Maquillaje, quizás, pero no cambio verdadero. Ello exige otro gobierno, con una revocatoria presidencial y congresal, una Asamblea Constituyente que diseñe un nuevo país y derogue la fujimorista, y una nueva política económica a favor de la gente. Lo demás es ilusión.

Ante la crisis económica global, ahora más que nunca es imprescindible levantar una izquierda de combate


Declaración de Espacio Alternativo

En las últimas semanas estamos comprobando cómo saltan todas las alarmas del capitalismo global: la crisis ha estallado y ya es imposible ocultarlo. Los gobiernos se apresuran a “tomar medidas” acudiendo al rescate de bancos y empresas a costa de hipotecar el dinero público, el nuestro, el de las y los trabajadores, mientras los ejecutivos que han dirigido el desastre se van a sus casas con sumas millonarias. Pero para nosotros la crisis hacia ya tiempo que había estallado. La carestía de la vida, el paro, los despidos y los recortes salariales son elementos habituales de nuestras vidas. Sin embargo para nuestra crisis no existen grandes medidas ni tampoco inyecciones de dinero público: los préstamos de los bancos los avala el estado, nuestras hipotecas las sufragamos nosotros mismos. En el capitalismo siempre ganan los mismos, los ricos, mientras el resto pagamos la resaca de su borrachera especulativa.

Pero aunque su expresión es ahora más evidente que nunca, la crisis no es nueva. De hecho el funcionamiento histórico de la economía capitalista nunca ha sido armónico, sino que se caracteriza por la sucesión de crisis periódicas de distinta modalidad y profundidad, pero todas ellas relacionadas con los problemas de rentabilidad que la misma lógica capitalista genera. En un intento continuo por defenderse de su propia naturaleza suicida, el capital trata de resolver sus problemas de rentabilidad huyendo del ámbito productivo y refugiándose en los mercados financieros, donde aparentemente puede obtener beneficios ilimitados. De esta forma, se puede afirmar que la era neoliberal es la de la hegemonía del capital financiero. Las finanzas impusieron su ley, de forma que son los intereses del capital financiero los que prevalecen, y la lógica propia de los mercados financieros la que se impone a toda la actividad económica. Es la financiarización de la economía. Las empresas de cualquier sector, en su búsqueda por maximizar sus beneficios emprendieron una participación creciente en las actividades financieras, hasta tal punto que ya en el 2000 dedican tres veces más recursos a comprar activos financieros que a invertir en su propia actividad productiva. Un boom en el que las empresas han ido adquiriendo una cantidad ingente de títulos financieros, como por ejemplo acciones de otras empresas, que en 1970 representaban un 58% sobre su capital fijo y en 2001 alcanzan el 147%. Así, los ingresos que obtienen las empresas en forma de dividendos (rentas financieras) han pasado de representar un 3% de las ganancias totales en 1970 a un 51% en el 2001. Durante años este juego financiero que permitía la obtención de beneficios enormes, fáciles y rápidos, parecía no tener límite. Pero ha alimentado burbujas que ahora empiezan a estallar, poniendo en cuestión la propia lógica capitalista que las generó, y golpeando severamente con su caída a la economía real.

Contrariamente de lo que nos quieren hacer ver, la crisis actual no responde simplemente, a la mala gestión de un puñado de bancos y empresas; ni siquiera se limita a una quiebra financiera que pondría en cuestión una modalidad “financiarizada” del capitalismo. La crisis actual, que es una expresión más de la crisis estructural del capital, converge con otras expresiones de la naturaleza suicida del capitalismo. En particular, la gravedad de las crisis energética (aproximación al cenit del petróleo “peak oil”), y ecológica (insostenibilidad de los modelos dominantes de producción, distribución y consumo), es ya innegable. Adicionalmente y como consecuencia tanto de las dos anteriores como de la expansión de la lógica financiera a todos los ámbitos de la economía (los alimentos y las materias primas son también objetos de especulación en los mercado financieros internacionales), estamos también en puertas de una crisis alimentaria sin precedentes. El mantenimiento de la economía capitalista amenaza la continuidad de los procesos ecológicos esenciales y de los mismos ciclos vitales.

En el Estado español el gobierno del PSOE se ha apresurado a seguir la estela de las medidas de ayuda a los bancos de las grandes potencias capitalistas, mediante la creación de un fondo anticrisis de 30 mil millones de euros del erario publico, ampliables hasta 50 mil (entre el 3% y el 5% del PIB) para comprar a las entidades activos "de máxima calidad". A la par que también elevaba la garantía de los ahorros hasta los 100.000 euros por titular y cuenta, y propone “garantizar” a los bancos su propio negocio, para que se animen a continuar con él en momentos de incertidumbre como el actual, avalándoles con dinero público los créditos que conceden. Dichas medidas pretenden asegurar, en palabras del gobierno, el bienestar de nuestro sistema financiero y dar confianza al mercado. Pero no tenemos ninguna garantía de que ni el sistema financiero ni el mercado vayan a utilizar el dinero público que les estamos transfiriendo en reanimar la actividad económica: ¿mantendrán los puestos de trabajo? ¿asegurarán un crecimiento salarial mínimo? Ya estamos viendo que no: la patronal, que felicita al gobierno por sus medidas, comienza a reivindicar “reformas laborales” que “flexibilicen el despido”, mientras ya están en marcha las reducciones de plantilla, los EREs, los cierres de fábricas, etc., que agravan la ya difícil situación de miles de trabajadores y trabajadoras. ¿Qué medidas pone en marcha el gobierno para estas familias?

Lo que hasta hace poco era un “parón económico”, y poco tiempo después una “paulatina desaceleración”, ya no se puede ocultar que es una crisis en toda regla. Y a pesar de que el gobierno pretenda echar balones fuera acusando a la crisis financiera global, la crisis tiene una especificidad y un origen propios en el caso del Estado español. Los 12 años de crecimiento económico ininterrumpido que han sucedido a la crisis del 92-93 (que golpeó duramente sobre la producción y el empleo, llegamos al 24% de paro en 1994) hicieron famoso el denominado “milagro español”. Pero el supuesto “milagro” se basaba en un modelo que dependía de dos pilares extremadamente frágiles: la construcción y el sector servicios, fundamentalmente el turismo. Además de la precariedad laboral y la depredación mediombiental al que dicho modelo ha dado lugar, su vulnerabilidad en caso de crisis es evidente. La economía del ladrillo, el sol y la playa ha entrado en una caída libre que no parece tener final, mientras que por el camino ha aniquilado buena parte de nuestro tejido industrial y de nuestro patrimonio natural, azotados ambos por el Tsunami urbanizador.

La época en que lo imposible era posible, es decir, la transformación urbanística de cualquier espacio a cualquier precio, parece que ha tocado a su fin. La imagen de “Paco el Pocero” abandonando a su suerte su megalómano proyecto de ciudad en Seseña es la imagen mas palpable y simbólica del final de esta etapa. La burbuja inmobiliaria ha estallado, y con ella, como si de un castillo de naipes se tratara, están empezando a desmoronarse los motores de nuestra economía. Y los efectos sobre los trabajadores no se están haciendo esperar. En septiembre, el crecimiento del paro ya ha sido el doble de lo que se registró en la crisis de 1992-93. En sólo un año, entre agosto de 2007 y agosto de 2008, el paro ha aumentado nada menos que un 36%, desde el 8,3 al 11,3 % de la población activa (datos de Eurostat). Hace un año la tasa de paro de España era un 17% superior a la media de la UE y apenas un 12% más alta que la media del área Euro. Hoy, España, con la tasa de desempleo más alta de los Veintisiete países, presenta una tasa 51% más alta que la media del área euro y 64% superior a la media de los Veintisiete. Lo miremos como lo miremos, el desastre en términos de desempleo es y promete ser muy grave. La construcción, actividad a la que de forma directa o indirecta se encuentra vinculado el 25% de la población del país, registra un saldo escalofriante: los parados en este sector han crecido en sólo un año un 86%, frente a incrementos del 22% en la industria y del 24% en sector servicios (datos del Ministerio de Trabajo e Inmigración). La crisis en el sector de la construcción, y los efectos de la crisis financiera, afectan a todos los sectores productivos, por lo que, como demuestran los datos de desempleo, la economía españolan será incapaz de absorber la cantidad ingente de puestos de trabajo que destruye el sector inmobiliario. Este crecimiento alarmante del desempleo, además de ser grave en sí mismo, es la punta de un iceberg cuya dimensión no es posible predecir con exactitud, pero que sin lugar a dudas va a golpearnos a los trabajadores con gran violencia.

Desde Espacio Alternativo pensamos que estamos ante una alarmante situación de crisis económica global que dista mucho de limitarse exclusivamente al pinchazo de la burbuja financiera, sino que además se conjuga con una crisis energética, alimentaria y ecológica profunda, y que en el caso del estado español entronca con el propio pinchazo de la burbuja inmobiliaria, lo cual nos hace aun mas vulnerables. La depredación capitalista, única culpable de esta situación no puede seguir manteniéndose impune a costa de la expoliación y el sufrimiento de los de abajo, es imprescindible revertir las reglas de este juego injusto, ahora más que nunca tenemos la urgencia de levantar un proyecto emancipador que defienda decididamente que nuestras vidas valen más que sus beneficios.

¡Nuestras vidas valen más que sus beneficios!

¡La crisis que la paguen los ricos!

Colombia: "La fuerza pública nos asesina y exigen disculpas". VÍDEO



VÍDEO SOBRE LA REPRESIÓN A COMUNER@S INDÍGENAS, POR PARTE DE LA FUERZA PÚBLICA:
http://es.youtube.com/watch?v=KS6zqMPS34k

Mario Vargas Llosa y los mestizos latinoamericanos criollos e hispanohablantes


Antonio Rodríguez Salvador
Rebelion.org

Según el diario español "El País", que tomó el reporte de Efe, Mario Vargas Llosa ha afirmado que “Evo Morales no es un indio, sino un criollo latinoamericano típico, un mestizo hispanohablante”. Eso dijo en Barcelona, el 1 de octubre pasado, en una rueda de prensa antes de impartir la conferencia titulada Sueño y realidad de América Latina, y apenas empecé a leer el artículo fruncí el entrecejo. Había algo que no me encajaba en el concepto de “criollo latinoamericano típico”, de alguna manera opuesto al de indígena; ya se sabe que “criollo” fue un término empleado por primera vez en el siglo XVI, en Latinoamérica, y que servía para diferenciar a los descendientes de los colonizadores europeos, respecto de los indios y los negros.

En fin, de inmediato me asaltaron varias dudas: ya se sabe que durante el proceso de comunicación la mente humana suele generar conexiones de diversa índole: examina referentes, dispone de arquetipos; asigna sentidos. No daré una clase de lingüística aun cuando el término hispanohablante opuesto al de indio alcanzaría para ello —sobre todo porque pasan de varios cientos los vocablos indígenas que forman parte del español. Para aclararle al lector —o quizá para confundirlo aún más— solo pondré un ejemplo de los arduos laberintos por los que suele transitar el idioma, y que de alguna manera tienen relación con mis ansiedades cognoscitivas ante lo dicho por Mario Vargas Llosa. Se sabe que, según la teoría de la evolución de Darwin, un perro es un ser superior a una planta: al menos siente y padece y se mueve por su propio impulso; no vejeta. Sin embargo, veamos una paradoja de la comunicación: a una mujer seguramente le halagaría que la comparasen con una flor, pero nunca que le digan pareces un animal. Incluso, en un poema nuestra amada pudiera ser un ave: o sea, una tórtola o una gaviota; y hasta un insecto, es decir una mariposa; pero difícilmente acepte ser comparada con una víbora o una mona… En fin, el lenguaje es asunto complejo, y más complejo entenderlo, porque a veces su lógica no tiene sentido, y viceversa. De modo que me dije, no te adelantes, continua leyendo. Espera que Vargas Llosa argumente la idea; ya sabrás por qué un indio de Bolivia de pronto no clasifica entre los latinoamericanos; por qué no debe ser hispanohablante. Pero he aquí que de pronto la explicación me llenó de mayor perplejidad: “Evo está acabando con Bolivia”; “está creando problemas monstruosos con la cuestión racial”.

Ya mencionamos el tema de los arquetipos; y, como Vargas Llosa es escritor —y también articulista, y orador, y sobre todo fue candidato a la presidencia del Perú— ha disparado ya suficientes palabras al aire y al papel y al éter y al mundo virtual, para que, más o menos, uno puede hacerse un cuadro de cómo piensa. Por ejemplo en una oportunidad dijo: “hay que modernizarlos, (a los indios) aunque ello signifique sacrificar sus culturas, para así salvarlos del hambre y la miseria”. Pero de pronto descubro que no sería modernizarlos según el método de Evo, es decir: alfabetizándolos, repartiéndoles tierras, posibilitándoles el acceso a la medicina: parece que esto significa destruir a un país.

La modernización a lo Vargas Llosa quién sabe si hubiera sido como aquella ordenada hace ya casi medio siglo atrás por cierto militar panameño: las indias no se pintarán la nariz, sino las mejillas como debe ser, y tampoco usaran aros en la nariz, sino en las orejas… Como debe ser. Esa es una variante posible; pero quizá tan solo los modernizaría de otra manera. Por ejemplo naturalizándolos ciudadanos españoles, tanto como él hizo consigo mismo, porque está claro, según ya vimos, que no sería convirtiéndolos en criollos hispanohablantes; es decir, en latinoamericanos típicos: ¿no acaba de amonestar a Evo por poseer esa condición?

En fin, yo suponía que el reproche al presidente boliviano vendría por aquello de: Caramba, hombre, de alguna manera usted es parte de nosotros —desde luego, el nosotros en el sentido de los colonizadores, las trasnacionales, la oligarquía, etc.— entonces, don Evo, qué hace usted nacionalizando hidrocarburos y despojando de tierras a la misma gente suya para darle propiedades y medios de vida a esos indiotas (Aclaro que el término indiota lo tomé prestado de la novela Conversación en la catedral, de Mario Vargas Llosa)

Nada, que tampoco Vargas Llosa estaba diciéndonos: Caramba, miren qué oveja descarriada nos ha salido este don Evo Morales; vean cómo tiene un por ciento de esta muy valiosa sangre aria nuestra —es decir, goda— y, sin embargo, ahí está creando esas rentas llamadas Dignidad y esos bonos Juancito Pinto, a cuenta de nuestros bolsillos, que son como los de él. Qué va. No era ese el reproche. Entonces pensé que en realidad habría querido expresar otra cosa; algo así como: Óigame, Evo, no quiera usted beneficiarse con el complejo de culpa que los europeos (naturales y no naturales) padecemos con los indios americanos: sabido es que ya los señores europeos de los discursos y los medios de difusión no dicen “Descubrimiento de América”; ahora han asumido su deuda con los indios, y la pagan con el eufemismo “Encuentro entre dos culturas”; pero usted, Evo, es un simple criollo mestizo hispanohablante que no clasifica en la categoría de los que a veces nos hacen recordar cierta culpa nuestra: a ustedes, los criollos, no se les asesinó tanto ni se les esclavizó o condenó a vivir como burros, sino en todo caso como a caballos, dos categorías que son muy distintas, sobre todo porque, simbólicamente hablando, distintos son los arquetipos que el idioma le carga a ambas bestias.

Vean como el asunto del idioma me asalta una y otra vez. Y es que en realidad suena bastante a regaño el hecho de que Evo hable el idioma español. Pero reitero mi compromiso anterior: no abundaré demasiado en cuestiones lingüísticas, ni tampoco en el hecho de que, antes de volverse europeo, Mario Vargas Llosa fuera un criollo latinoamericano típico, aunque justo es aclarar que todavía es hispanohablante. Sólo me pregunto —si lo que en verdad reprocha a Evo es que gobierne pensando en los indios— cómo iba a gobernar él mismo en el Perú donde uno de cada dos habitantes es indígena. ¿Cómo iba a conseguir modernizarlos si, aunque la constitución peruana reconoce la igualdad de condiciones entre el quechua y el español, habría que apuntar como Eduardo Galeano: “La Constitución lo dice, pero la realidad no lo oye. El Perú trata a los indios como África del Sur trata a los negros. El español es el único idioma que se enseña en las escuelas y el único que entienden los jueces y los policías y los funcionarios. (El español no es el único idioma de la televisión, porque la televisión también habla inglés.)”

En fin, yo permanecía colmado de dudas, y lo peor: estas crecían en la medida en que avanzaba en la lectura del artículo. Vean ustedes, el caso es que yo también soy un típico criollo hispanohablante, y algo de mestizo también habré de tener: en Cuba decimos que quien no tiene de congo tiene de carabalí. De modo que continué leyendo hasta el final: confieso que me picaba bastante la curiosidad; sobre todo quería ver qué parte del pecado original de Evo yo también debía cargar. Pero terminé la página, y del susodicho tema indígena, así como de los orígenes del criollo, solo se me explicaba que, si quería ahondar en mis conocimientos, debía consultar las primeras crónicas que se escribieron por estas tierras. Caramba, qué dilema, qué prodigio de la información moderna con todos esos hipervínculos que ahora convierten a un simple artículo en una historia interminable. Sin embargo, no encontraba por ninguna parte del texto esas palabras en fuente de color azul que trastoca en una simpática manito la flecha del cursor, y que en este caso significaría “pinche aquí para acceder a los cronistas de Indias”.

Perdonen la digresión, pero ahí mismo empecé a echar la culpa del dislate a los diseñadores de periódico El País: ya se sabe que con frecuencia se equivocan. Por ejemplo hace un par de meses presentaron la foto de una pacifica reunión de miles de indígenas partidarios de Evo como si en verdad estuviesen a favor de sus opositores, y luego, en cambio, colocaron una incendiaria revuelta de autonomistas —con sus escudos verdes y sus cruces bizantinas, emblemas de estos— y el pie de foto equivocadamente decía: “Partidarios del presidente de Bolivia, Evo Morales”.

Sí, estos diseñadores de El País que no hacen correctamente su trabajo, para que luego la gente diga que es la gerencia del Grupo Prisa que teme a las nacionalizaciones en Bolivia, un país donde controlan el diario La Razón, y hasta hace muy poco el matutino El Nuevo Día. ¡Cómo si El País no fuera un diario plural y de izquierda!

Bien, siguiendo el orden cronológico de mis razonamientos, luego me dije: Hombre, quizá no han colocado el hipervínculo para evitar demandas legales: conocido es el caso de lo ocurrido al periodista Pascual Serrano, que por citar someramente a Vargas Llosa recibió un correo electrónico de la gerente comercial de “El País Internacional” exigiéndole pagar derechos de autor. Entonces salté iluminado: Caramba, tiene lógica. Puede que tanta brevedad confusa del artículo haya sido engendrada por la prudencia. Vaya usted a saber si los de Efe temieron que de pronto el propio Vargas Llosa les presentara una demanda por citarlo en exceso (quién sabe si por eso el artículo nos está haciendo un guiño al advertir que este señor es un “liberal a ultranza”: ya sabemos que para los liberales, —calculo que mucho más para los liberales a ultranza— business are business, y que, para el triunfo legítimo de una individualidad liberal a ultranza, funcione muy bien la máxima de que el dinero es amigable, pero no tiene amigos)

En fin, que otra vez me enredé en las elucubraciones, porque de pronto caí en cuenta de que los Cronistas de Indias no tienen copyright. Así que me armé del consabido refrán: Si la montaña no viene a Mahoma, Mahoma va a la montaña; y entonces pinché el URL de una biblioteca virtual.

Como es lógico, empecé la lectura por los cronistas de la conquista del Perú. El primero que cayó a mano fue Pedro Cieza de León; pero a poco de avanzar en la lectura, comprobé que, sobre todo, aquél veía en los indios a unos salvajes capaces de la crueldad y “del pecado nefando de la sodomía”. Así pasé a Agustín de Zárate, solo para ver que usaba un tono arbitrariamente condenatorio al juzgar a los gobernantes de Cuzco. Salté entonces a Pedro Sarmiento de Gamboa, y este me explicó que los incas eran unos tiranos usurpadores; en su Historia de los incas, pinta cuadros de terror e infamias indígenas. En fin, no seguí leyendo después de consultar a Francisco López de Jerez, porque me parecieron un poco exageradas las hazañas de los conquistadores hasta la muerte de Atahualpa. (Aclaro que desde el principio descarté leer a Garcilaso de la Vega, el Inca, porque este era un típico criollo mestizo e hispanohablante)

O sea, que por esa vía me iba a costar una eternidad encontrar el cronista adecuado, aquel que por fin evacuara todas mis dudas anteriores, y que de paso me explicara si era un mito o una realidad —por ejemplo— la masacre de Pando. El asunto es que Vargas Llosa apunta que hay dos caras de América Latina, una concreta y otra llena de mitos. Por ejemplo, dice que la política de Evo es concreta, pero tiene una lectura que la convierte en fantasía. Esto, que a mí también me suena a cosa concreta, pero con su correspondiente lectura de fantasía, ahora mismo me hace recordar algo que recientemente publicó en El País, en un artículo titulado Caracas al vuelo. Allí escribió que Teodoro Petkoff le había contado una anécdota: Al tomar un taxi en el centro de Caracas, fue reconocido por el chofer. Este era un médico cubano que, en sus ratos libres, hacía de taxista para mejorar sus ingresos. Puestos a conversar, el médico-taxista le confesó a Petkoff una debilidad: “Cuando llegué a Venezuela y vi por primera vez una botella de Coca-Cola, se me llenaron los ojos de lágrimas". Vean entonces la moraleja de Vargas Llosa: “Si después de medio siglo de revolución, ese símbolo quintaesenciado del capitalismo despierta semejantes emociones en un cubano nacido y educado bajo la prédica ideológica de Fidel Castro, ¿quién puede dudar que el socialismo en su versión cubana tiene los días contados?”

Gracias a Dios, y con el perdón sea dicho, soy de los que se permite dudar y por eso pregunto. O sea, antes de preguntar necesito hacer una introducción. Recientemente se publicaron dos trabajos científicos contradictorios sobre la Coca-Cola. El primero fue publicado por los norteamericanos Sheree Umpierre, Joseph Hill y Deborah Andersson, en el New England Journal of Medicine, y afirma que la Coca-Cola tiene propiedades espermicidas; y, el segundo, apareció en Human Toxicology, suscrito por los taiwaneses C.Y. Hong, C.C. Shieh, P. Wu y B.N. Chiang, y por casualidad afirma todo lo contrario. En fin, mi pregunta a Vargas Llosa es la siguiente: ¿Cuál de los dos tipos de Coca-Cola se tomó el taxista de Petkoff?

Confieso que iba a dejar el asunto aquí, pero entonces fue que me asomé a la ventana de mi casa y vi que en el río flotaba una botella de Coca-Cola. Corrí a buscarla, y perplejo descubrí que dentro de ella había un mensaje. Increíble, me asombré, porque de pronto, y de acuerdo con sus diversos matasellos, descubrí que la botella había sido arrojada al río Manzanares en Madrid; de ahí fue a dar a Lisboa por el Tajo, bajó a Canarias por la corriente ecuatorial norte, atravesó el Atlántico y entró al Mar Caribe, y, al llegar a Cuba, subió por el río Jatibonico del Sur hasta cerca de mi casa. El mensaje era un artículo de Vargas Llosa, La segunda oportunidad, publicado hace un par de años en El País, y en el que al fin creí entender lo que éste deseaba para Bolivia. Al reflexionar sobre la democracia en su país natal, dice Vargas Llosa que el Perú necesita de una transición definitiva hacia “el progreso, la prosperidad y la libertad”, y como ejemplo de esas transiciones exitosas toma de modelo, nada menos y nada más, que a España y Chile. Entonces me estremecí. Dije: Caramba, para que un socialista pueda gobernar un país que marche camino de una sociedad avanzada, primero tiene que hacer un tránsito desde el fascismo. O sea, tener antes a un Pinochet o a un Franco sobre los cuales erigirse, perdonarles a los torturadores y asesinos todos sus crímenes y atrocidades, y por supuesto mantener intacto el modelo capitalista. Vamos, que ahora sí me pareció entender lo que deseaba Vargas Llosa para Bolivia; y todo gracias a una botella que algunos dirán que es de pura fantasía, pero sin poder negarle su lectura concreta.

jueves, 16 de octubre de 2008

ASFIXIA JURIDICA A LOS SIN PAPELES EN ESPAÑA


Al qué agarren sin papeles.......
por GUSTAVO ALVAREZ


Y se veía venir, con esto de la crisis la tienen en bandeja para aplicar la muerte por asfixia jurídica a los migrantes en España. Ya estaba dura la mano y el parto venía de nalga, con esto, ya no necesitan explicar nada de lo qué harán en un futuro. Parecía muy débil solo el retorno voluntario para aquellos “con papeles”, solo 5.000 se han interesado, muy débil el temilla del arraigo laboral o arraigo social, poco lo de estar 5 años de forma legal para poder reagrupar, débil recortar hasta lo inimaginable el acceso a un contrato por empleo de difícil cobertura, todo esto son minucias ya…. Ahora van a por la modificación total de la maldita ley de extranjería. Ahora la crisis les permite meter el bisturí a fondo sin importar una mierda qué se habla de seres humanos, quizás la nostalgia los ha ganado y van a por los inmigrantes como lo hicieron hace ya más de 500 años, la violación a las más elementales normas y leyes de defensa de los DDHH se la pasan por el forro, desde Zapatero hasta Rajoy, y en el medio un circo de payasos haciéndoles el jueguito. Pretenden la huída colectiva del inmigrante recortando todos sus derechos, violando todos los Protocolos Internacionales vigentes y con la complacencia de una gran mayoría de la sociedad que tan solo piensa en como salvarse a si mismo y son presas fáciles de engañar en este desordenado puzle de caos y decadencia, no solo económica, sino también moral y ética. El plan lo van materializando a diario con las redadas en todas partes en donde detienen a los qué “sobran” y les labran una orden de expulsión ejecutable por seis meses, esa orden de expulsión será el comienzo del fin, dado qué tal cuál están planteadas las cosas el echarla por tierra es imposible, y a partir de allí la ley de empadronamiento obligatorio cada 2 años, pero con una condición, contar con un elemento “legal” para el empadronamiento, menudo lío verdad? No hay empadronamiento? Pues entonces no hay sanidad, no hay educación, no hay acceso a las ayudas oficiales, etc…. Esta la reciprocidad qué aplican los que un día emigraron a otras latitudes y muy en contra de lo pensado no eran épocas de vacas gordas en algunas regiones, tan solo si había un pedazo de pan se compartía y punto, y no andaban los milicos atrás de ellos todo el día para meterlos en cana, hay diferencias verdad?, había “crisis” también en varios sitios pero jamás se nos pasó por la cabeza el aplicar estas barbaridades, parece como si lo tuvieran en los genes, son por naturaleza conquistadores y asesinos, insolidarios y faltos de memoria, si serán faltos de memoria qué recién ahora comienzan a reivindicar a sus propios muertos, podrían hacer un poco más de memoria aún y devolvernos todo lo qué nos robaron en la conquista y la matanza, aunque creo qué esto irá para bancos y afines viendo lo actual.

Se preguntarán el porqué los inmigrantes no hacen valer sus derechos. Muy sencillo. A pesar de llegar casi al 10% de la población no les da la fuerza para moverse o defenderse, son hoy el sector más expuesto a la arbitrariedad y el abuso, son el blanco del racismo y la xenofobia ante la pasividad y en otros casos la complicidad de una gran mayoría. Pero es en realidad el inmigrante quién debe moverse? Yo digo qué si, pero visto el patio como dicen por acá, no le voy a exigir a ellos “salvar el mundo”, cuándo la gran mayoría de los españoles ven como se deslocalizan las grandes empresas, como pierden su trabajo, como cae su nivel adquisitivo, como cada día trabajan más por menos, como empiezan a no llegar a fin de mes, como en Madrid privatizan hasta el portero de la Puerta del Sol, y no mueven el culo por nada, solo aplauden en su gran mayoría al gobierno por darle plata a los banqueros creyendo qué así accederán a créditos y sus hipotecas bajarán, pobres ilusos, ni van a bajar las hipotecas ni les darán créditos, a no ser qué sean de esa casta a los qué nunca les llega una crisis sea de la magnitud que sea, y si no se mueven ellos cuándo un país entero se les desmorona, tengo yo autoridad para exigir movilización y lucha a los inmigrantes?, tan solo me queda la denuncia de toda esta farsa y el estar tranquilo conmigo mismo de qué lo escrito lo plasmo a diario en mi vida, pero no puedo exigir viendo tanta desidia, estupidez e idiotismo de una gran parte de la sociedad española. Y hay otra parte qué de tan solidarios que son, en vez de dinamizar los cambios aquí tratan de darnos consejos de cómo hacer las cosas en Latinoamérica, por favor, qué ya los latinoamericanos no precisamos de liberados y oportunistas de turno, muevan las cosas acá y rescaten en parte la lucha de clase.

A por ellos era el grito de guerra de la selección española de fútbol en la Eurocopa, ese grito de guerra de a poco se está instalando en la piel de los nativos y ven en el inmigrante al culpable de todas sus penas, ojalá me equivoque pero creo qué lo peor aún está por venir y contamos con muy pocas chances, esto es como ir a la guerra con un escarbadientes. Tiempos difíciles se vienen y los desafíos son varios, el primero será el comprender mínimamente cuáles y quiénes son los verdaderos culpables de todo esto. Decía en mi artículo anterior hablando sobre la izquierda y los sindicatos españoles, de qué si estaban así era en gran parte producto de la voluntad de sus integrantes, en especial, de sus bases, qué se creyeron el cuento de hadas del consumo por el consumo y se olvidaron de luchar. No tengo recetas para resolver esa situación, solo me propongo a diario invitar a la gente a rebelarse dentro y fuera de sus organizaciones y recuperar el carácter de clase de estas, para de esa manera luchar por el conjunto de la clase, esa clase de la qué algunos han renegado y otros han tratado con escritos filosóficos de hacerla desaparecer, pero allí está, se trata de reorientar el camino aprendiendo de los errores cometidos y tener claro qué el enemigo es uno solo y no varios, el enemigo es quién ha llevado a esta sociedad a ser como es, el capitalismo salvaje disfrazado de social liberalismo han logrado enterrar años de lucha reduciéndolas a la nada, el enemigo es el capital y para construir el hombre nuevo es necesario y ahora más qué nunca el plantearse seriamente estudiar, debatir y acordar como somos capaces de comenzar a trazar un camino para exterminarlo de una vez y para siempre.

lunes, 13 de octubre de 2008

LA CRISIS DEL SIGLO

Por IGNACIO RAMONET

Los terremotos que sacudieron las Bolsas durante el pasado "septiembre negro" han precipitado el fin de una era del capitalismo. La arquitectura financiera internacional se ha tambaleado. Y el riesgo sistémico permanece. Nada volverá a ser como antes. Regresa el Estado.

El desplome de Wall Street es comparable, en la esfera financiera, a lo que representó, en el ámbito geopolítico, la caída del muro de Berlín. Un cambio de mundo y un giro copernicano. Lo afirma Paul Samuelson, premio Nobel de Economía: "Esta debacle es para el capitalismo lo que la caída de la URSS fue para el comunismo". Se termina el periodo abierto en 1981 con la fórmula de Ronald Reagan: "El Estado no es la solución, es el problema". Durante treinta años, los fundamentalistas del mercado repitieron que éste siempre tenía razón, que la globalización era sinónimo de felicidad, y que el capitalismo financiero edificaba el paraíso terrenal para todos. Se equivocaron.

La "edad de oro" de Wall Street se ha acabado. Y también una etapa de exuberancia y despilfarro representada por una aristocracia de banqueros de inversión, "amos del universo" denunciados por Tom Wolfe en La Hoguera de las vanidades (1987). Poseídos por una lógica de rentabilidad a corto plazo. Por la búsqueda de beneficios exorbitantes. Dispuestos a todo para sacar ganancias: ventas a corto abusivas, manipulaciones, invención de instrumentos opacos, titulización de activos, contratos de cobertura de riesgos, hedge funds... La fiebre del provecho fácil se contagió a todo el planeta. Los mercados se sobrecalentaron, alimentados por un exceso de financiación que facilitó el alza de los precios.

La globalización condujo la economía mundial a tomar la forma de una economía de papel, virtual, inmaterial. La esfera financiera llegó a representar más de 250 billones de euros, o sea seis veces el montante de la riqueza real mundial. Y de golpe, esa gigantesca "burbuja" ha reventado.

El desastre es de dimensiones apocalípticas. Más de 200.000 millones de euros se han esfumado. La banca de inversión ha sido borrada del mapa. Las cinco mayores entidades se han desmoronado: Lehman Brothers en bancarrota; Bear Stearns comprado, con la ayuda de la Reserva Federal (Fed), por Morgan Chase; Merril Lynch adquirido por Bank of America; y los dos últimos, Goldman Sachs y Morgan Stanley (en parte comprado por el japonés Mitsubishi UFJ), reconvertidos en simples bancos comerciales.
Toda la cadena de funcionamiento del aparato financiero se ha colapsado. No sólo la banca de inversión, sino los bancos centrales, los sistemas de regulación, los bancos comerciales, las cajas de ahorros, las compañías de seguros, las agencias de calificación de riesgos (Standard&Poors, Moody's, Fitch) y hasta las auditoras contables (Deloitte, Ernst&Young, PwC).

El naufragio no puede sorprender a nadie. El escándalo de las "hipotecas basura" (subprime) era sabido de todos. Igual que el exceso de liquidez orientado a la especulación, y la explosión delirante de los precios de la vivienda. Todo esto ha sido denunciado -en estas columnas- desde hace tiempo. Sin que nadie se inmutase. Porque el crimen beneficiaba a muchos. Y se siguió afirmando que la empresa privada y el mercado lo arreglaban todo.

La Administración del Presidente George W. Bush ha tenido que renegar de ese principio y recurrir, masivamente, a la intervención del Estado. Las principales entidades de crédito inmobiliario, Fannie Mae y Freddie Mac, han sido nacionalizadas. También lo ha sido el American International Group (AIG), la mayor compañía de seguros del mundo. Y el Secretario del Tesoro, Henry Paulson (ex presidente de la banca Goldman Sachs...) ha propuesto un plan de rescate de las acciones "tóxicas" procedentes de las "hipotecas basura" por un valor de unos 500.000 millones de euros, que también adelantará el Estado, o sea los contribuyentes.

Prueba del fracaso del sistema, estas intervenciones del Estado -las mayores, en volumen, de la historia económica- demuestran que los mercados no son capaces de regularse por sí mismos. Se han autodestruido por su propia voracidad. Además, se confirma una ley del cinismo neoliberal: se privatizan los beneficios pero se socializan las pérdidas. Se hace pagar a los pobres las excentricidades irracionales de los banqueros, y se les amenaza, en caso de que se nieguen a pagar, con empobrecerlos aún más.

Las autoridades norteamericanas acuden al rescate de los banksters ("banquero gangster") a expensas de los ciudadanos. Hace unos meses, el presidente Bush se negó a firmar una ley que ofrecía una cobertura médica a nueve millones de niños pobres por un coste de 4.000 millones de euros. Lo consideró un gasto inútil. Ahora, para salvar a los rufianes de Wall Street nada le parece suficiente. Socialismo para los ricos, y capitalismo salvaje para los pobres.

Este desastre ocurre en un momento de vacío teórico de las izquierdas. Las cuales no tienen "plan B" para sacar provecho del descalabro. En particular las de Europa, agarrotadas por el choque de la crisis. Cuando sería tiempo de refundación y de audacia.
¿Cuánto durará la crisis? "Veinte años si tenemos suerte, o menos de diez si las autoridades actúan con mano firme", vaticina el editorialista neoliberal Martin Wolf (1). Si existiese una lógica política, este contexto debería favorecer la elección del demócrata Barack Obama (si no es asesinado) a la presidencia de Estados Unidos el 4 de noviembre próximo. Es probable que, como Franklin D. Roosevelt en 1930, el joven Presidente lance un nuevo "New Deal" basado en un neokeynesianismo que confirmará el retorno del Estado en la esfera económica. Y aportará por fin mayor justicia social a los ciudadanos. Se irá hacia un nuevo Bretton Woods. La etapa más salvaje e irracional de la globalización neoliberal habrá terminado.

NOS DEJA UNO DE LOS FUNDADORES DEL MIR, NELSON GUTIERREZ (el guti )

UN REVOLUCIONARIO MAS NOS DEJA EN OCTUBRE.
Hector Luis Sandoval

Falleció el Guti, como le conocíamos desde sus inicios en el MIR, un militante fundador del MIR, brillante como pocos, miembro de su primer Comité Central y del Secretariado Político y posterior Comisión Política del MIR.

Para el año 1968 año del Mayo Francés y de las revueltas estudiantiles en Europa, fué uno de los artífices de la Reforma Universitaria que vanguardizó la Escuela de Sociología siendo él entonces, el Presidente de la Federación de Estudiantes de la Universidad de Concepción de donde egresó graduado de Sociólogo.

Dirigente del MIR en la clandestinidad un Octubre de 1975, Nelson Gutiérrez, padre de Paula y Nelson hijo, compañero de vida y de lucha de Maria Elena, caía herido en el combate contra la dictadura en el cerco de la DINA, en una parcela de Malloco desde donde pudo escapar junto a su familia y aún así ayudar a escapar a otro de sus compañeros cercados, a pesar de estar herido।

Ahí es donde se mide la grandeza de un militante revolucionario que no se sustenta solo en la teoría, sinó que también en la practica de la solidariedad militante concreta y noble, a él me refiero, al que a diferencia de otros, no estaba dispuesto a dejar tirado en el camino a nadie, porque para él el MIR era algo más que un mero partido político, era una organización donde cada uno valía tanto como el que más.

Años después retornado clandestino cumplió tareas de dirección en el Norte grande y Norte Chico. Nelson Gutiérrez después de la división formalizada de 1985 del MIR, se jugó la carta de refundar el MIR bajo una línea política que impidiera la debacle en marcha y su destrucción selectiva y siguiera jugando un rol político en Chile, cosa que no logró.

Retornado definitivamente a Chile dedicó todas sus energías e ingenio a romper el bloqueo a Cuba comercializando productos marinos desde nuestra zona, en esa tarea internacionalista lo sorprendió la muerte, con el deber cumplido.

Hoy un día de Octubre se nos fué, como Dagoberto Pérez como Miguel Enríquez como el Ché y como los centenares de jóvenes estudiantes que fueron masacrados un Octubre en la Plaza de Tlatelolco de ese México lindo y querido tan pedagógico.

En Octubre tenemos a uno menos de nosotros y Cuba a la que tanto amó le extrañará, hoy más que nunca por los desastres de los huracanes.
Nuestro sentimiento de pesar a su familia.

MI HOMENAJE AL DIRIGENTE QUE HUMANAMENTE MÁS ME ENTREGÓ SU NOBLEZA Y CON EL QUE MENOS TIEMPO CRONOLÓGICO COMPARTÍ

Hoy despedimos al Guti, un líder fundador del MIR, brillante como pocos, la verdad es que no abundan los políticos que brillan con colores propios, menos en estos tiempos en que la mediocridad es la nota común a tantos que mediáticamente buscan figurar.

Siempre tuvimos la tendencia de atribuirle a Miguel la paternidad de las políticas que se elaboraron, muchas veces opacando la genialidad teórica de Bautista, el rigor organizacional de Edgardo o el ímpetu de Arturo por poner solo algunos ejemplos.

De tantos sociólogos que pasaron por el Comité Central quizás demasiados para mi gusto, sin dudas quien mejor manejó las categorías marxistas de análisis para elaborar políticas concretas fue el Guti. Cualidad que fuera reconocida por Fidel en conferencia de prensa cuando le preguntan su opinión sobre los entonces jóvenes lideres del MIR con quienes tuvo encuentros y discusiones en su visita a Chile, lo señaló como al que más proyecciones le veía a nivel Latinoamericano. Lamentablemente después de la muerte de Miguel el Guti le cedió el cargo que le correspondía, a otro sociólogo que fue anulado por la política de la Inteligencia del Estado Mayor de la Tiranía política que aún hoy desconocemos en su integridad o soslayamos impotentes y ese otro sociólogo terminó siendo anulado desgraciadamente.

El Guti nunca fue un orador descollante como Luciano, tampoco pretendió serlo porque como Luciano ninguno lo fué, tampoco fue un constructor de terreno incansable como el Alexis o el Trosko. Pero no tengo dudas que fue un pensador de la política contingente, aterrizado al estado de ánimo de las masas y a la correlación real de las fuerzas sociales y políticas.

Como dijo Martín Sanzana, queda pendiente la tarea de rescatar su legado político porque como pocos fue un neto elaborador de políticas con ductibilidad táctica y proyección estratégica. El tema de la revolución proletaria esta contenido en todos sus aportes desde los inicios, cuando los revolucionarios eran causa de temores fundados en la clase política tradicional, desde los primeros tiempos de la lucha ideológica con las distintas tendencias que cruzaron la primera parte de la formación del MIR y posteriormente con el reformismo obrero y con el reformismo pequeño burgués.

El Guti entiendo que tuvo participación directa en la elaboración de todas las políticas que se levantaron desde el MIR y que éstas no eran solo ni exclusivamente obra de Miguel, con todo lo brillante que también lo era, las líneas de acción eran producto de un colectivo generacional, al que este compañero pertenecía desde sus inicios.

Creador de una reserva estratégica de intelectuales desde la Facultad de Economía y Sociología de la Universidad de Concepción que en apoyo a la dirección dieron a luz muchas de las políticas que hicimos nuestras y levantamos en el movimiento de masas, como la unidad obrero campesina y obrero estudiantil, entendido el movimiento estudiantil como fuerza auxiliar de la revolución.

Luego vinieron las política del poder popular con los Cordones Industriales y los Comandos Comunales, la política del polo reagrupador de fuerzas revolucionarias que culminaran con la Asamblea del Pueblo en Concepción, hasta las políticas más generales como el concebir la mayor unidad social con carácter estratégico, ésta entendida como expresión de una alianza de clases que conocimos como los pobres del campo y la ciudad y que tanto sentido tuvo en nuestra generación.

Como miembro de la Dirección Exterior transformó el exilio en una retaguardia estratégica e impulsó la política de recuperación de cuadros desde ese exilio tan menospreciado, me refiero a lo que se conoció como Política de Retorno, aún mal evaluada y peor implementada, pero su concepción salió de la calidad de su análisis de la realidad política chilena, su balance está pendiente, quienes retornamos tenemos que hacerlo, pues de los dirigentes que nos quedan deambulando por ahí nada podemos esperar como no sean anécdotas charchas.

La memoria histórica necesita de su lagado, el Guti quedó en deuda con nosotros porque su vida se extinguió cuando aún tenía tanto por hacer, esperamos que Martín Sanzana pueda hacer la síntesis, todo saber es necesario sobre todo cuando la confusión es casi dramática, si no fuera por algunos intentos de experiencias nuevas para recuperar el carácter revolucionario que adquirió nuestro pueblo cuando el MIR hizo temblar a los políticos tradicionales y aterrorizar a la clase dominante, el balance histórico debemos asumirlo todos nosotros, no podemos esperar absolutamente nada de quienes compraron el neoliberalismo o se fueron para la casa dejando todos los anhelos y propósitos tirados en la vera del camino que aspirábamos construir। Nada podemos esperar de los ex dirigentes que perduran haciéndole guiños a los dominadores, cuya mediocridad los consume.

El Guti militante de una calidad humana enorme y de bajo perfil, fue ajeno a la parafernalia política y al anecdotario de nuestra historia militante, con el se fué el ultimo dirigente histórico con capacidad de elaborar propuestas políticas concretas, siempre lo recordaremos y será un referente, desde la creación del MUI hasta el Retorno, desde el poder popular hasta el movimiento de resistencia popular. Tal vez su fracaso de renovar el MIR para los nuevos tiempos sea lo más controvertido, eso será tema para los historiadores siempre y cuando exista una autocrítica de quienes lo acompañaron y después fueron inconsecuentes y oportunistas con sus postulados. La historia dirá si las generaciones que nos suceden extraerán las enseñanzas suficientes para no dejarse guiar por luciérnagas que alumbran solo en una estación del año y el resto del tiempo invernan.

El Guti, concientemente o nó de que la dirección estaba infiltrada por políticas monitoreadas por la Inteligencia, -a mi juicio personal- en su intento de refundar al MIR fue el más revolucionario de todos los de ese periodo, pues podría haber salvado el partido de la destrucción total, levantando una política alternativa a la predominante otra hubiera sido la transición con el MIR presente, en la práctica creo que significaba eso, sacar al partido del circulo de fuego en que lo había metido la inteligencia, y seguir luchando refugiado en el movimiento de masas sin dejar de combatir a la Tiranía, pues en la dirección se había instalado una línea política claramente funcional a la infiltración de la inteligencia del estado.

No quiero hablar por el Guti hablo por mi experiencia no me consta lo que pensaba el Guti, nunca conversamos privadamente de nada, yo sostengo que la dirección estaba infiltrada con una política y con ejecutores de esa política, y si su proyecto de refundar o de “renovar” al MIR –creo que ese concepto de renovación fue desatinado- si hubiera tenido éxito, hoy los agentes encubiertos en nuestras filas no andarían tan sueltos de cuerpo en los actos de nuestra memoria histórica.

Tengo claro después de lo vivido en los años de retorno clandestino que la Inteligencia del Estado Mayor de la Defensa Nacional había inducido una política en un sector importante de la dirección después del combate de Malloco, con agentes encubiertos que tenía posicionados desde antes del 70 incluso, pero después de Malloco es cuando realmente comienza la división orgánica del MIR, quienes sostienen otra fecha como el año 1884/5 están en un error, después de la Conferencia Germán Cortés del CC en la Habana es cuando ahí es donde se produce la ruptura final, pero la división comienza con el Juicio Sumario al Secretario General Andrés Pascal, cuando asilado pretende salir con el cargo al exilio.

Pero le refundación no fue acogida y la inteligencia pudo más, aprovechándose de la inexperiencia de las generaciones de recambio que hicieron ecos a los cantos de sirena de la inteligencia que los convocaban a la toma del poder para prolongar la estadía de los golpistas reprimiendo al pueblo y también gracias a que nosotros carecimos de una política colectiva de contrainteligencia.

Pero aún así su aporte perdurará en lo que fue la extensión de la concepción de militantes por frentes de masas organizados en los FTR donde le disputamos la conducción al sindicalismo clásico, ese sindicalismo economicista de servicio social mutualista y de los frentes sociales estigmatizados y marginados de la sociedad como los pobladores y los campesinos pobres que organizamos en los MPR y los MCR. Eran tiempos donde los pobres y analfabetos no contaban para nada en los partidos obreros tradicionales porque no votaban, y el sistema dominante no les permitía votar porque no sabían escribir o porque no tenían un carné de identidad. En todas estas políticas de rescate de la memoria histórica para lucha y la dignidad humana, estará presente el militante Guti.

El Guti no era un orador, pero tenía un cerebro de ideas y materialista desde donde surgían propuestas concretas, buscando siempre ampliar las alianzas políticas y sociales, tácticas y estratégicas en busca de fortalecer las posiciones revolucionarias sin abandonar el propósito estratégico, la revolución proletaria.

Esa necesidad y vigencia nos la resaltaba hoy Ricardo Frodden, el Richi, en el cementerio de Concepción desde su opción actual, el Movimiento por la Asamblea del Pueblo, allí nos recordaba que no todo esta perdido y que nuestro compromiso es continuar ese camino, que no hay otra alternativa, la revolución se necesita, que está por hacerse y vigente y para ello debemos continuar trabajando sin desmayar, no es una tarea inconclusa es una tarea pendiente y en curso.

Seguramente que ningún grupo u organización revolucionaria por si sola podrá hacer la revolución, por ello se debe construir un instrumento revolucionario de clase, con alianzas de clases revolucionarias, nada debe impedirnos que avancemos en esa línea.

Mas aún cuando somos testigos de como en nombre de la democracia occidental y de la libertad de mercado masacran al pueblo Agfanos, al pueblo Iraquí, al pueblo Palestino, y a otros pueblos. Como quisieran los dueños de las forestales en Chile masacrar a nuestros peñis mapuches y sacarlos definitivamente de sus tierras como ayer lo hicieron los yanquis con los mejicanos del norte y nuestros gobernantes con los Bolivianos y Peruanos.

Que hacemos hoy, nos increpaba el Richi, cuando se inicia un nuevo genocidio por hambrunas, esa es la esencia del sistema de acumulación y de dominación capitalista, por ello más que nunca nos llamaba desde el Movimiento por la Asamblea del Pueblo; necesitamos trabajar para hacer una revolución, eso es parte de la herencia política del Guti, transformar la realidad, hoy se requiere de la pedagogía del Guti para no limosnear un asiento en el parlamento con acuerdos a espaldas del pueblo, para no utilizar a los trabajadores por una política de inclusión o un pacto de omisión. Eso no es hacer revolución eso es una dadiva para los menesterosos.

Guti, gracias por haberme acogido en el seno de la revolución cubana cuando la inteligencia incrustada en la dirección del MIR me expropió de la militancia y el pueblo cubano me devolvió el sentido de pertenencia.

Chacha.

sábado, 11 de octubre de 2008

Francia-Europa: "¿El nuevo partido anticapitalista (NPA), LCR-bis o apertura a todas las corrientes de la otra izquierda?”.


Introducción explicativa de redactor de SurcoAustral: ENTREVISTA CON ALAIN KRIVINE sobre el Nuevo Partido Anticapitalista (NPA, proyecto en formación, impulsado desde la LCR francesa) en la revista "Savoir-agir".
Reproducida de www.espacioalternativo.org

UNA ASPIRACIÓN ANTIGUA.

Alain Krivine: Desde que creamos la Ligue (Ligue Communiste Révolutionnaire, LCR), siempre tuvimos la pretensión de reunir a todos los anticapitalistas en su seno. Así pues, la idea de ampliarnos un día es una muy vieja idea. Esto explica por otra parte que hayamos tenido siempre una práctica unitaria. Hasta 1995, no hemos hecho prácticamente jamás campaña en nuestro nombre. Hicimos la campaña Juquin en 1988, retirando mi candidatura para ello. Estuvimos en la CAP en el año 1990. Participamos en todos los colectivos posibles, retirando nuestros candidatos, incluso nuestras siglas. Es una diferencia con Lutte Ouvrière (LO) pues, por ello, nuestra sigla no era electoralmente creíble, a falta de presentarnos.

No lamentamos nada pero estamos al menos obligados a constatar que todas estas tentativas fracasaron. La mayor parte de nuestros aliados de esa época se separaron de nosotros, uniéndose a otros partidos, el PS en particular. Es por otra parte un tema de debate interno entre nosotros, pensando muchos que cometimos errores. Yo no lo creo. Me parece más fácil corregir las cosas sobre la base de una cultura unitaria que de una cultura sectaria.

¿Por qué tomar la iniciativa del NPA ahora, tras un fracaso, el de las candidaturas unitarias, que ha marcado mucho a la militancia?

A. Krivine: La LCR ha participado en la campaña del no. El resultado del referéndum fue en un cierto sentido nuestra primera victoria, y no una victoria por procuración. Era nuestra victoria. Nos empleamos a fondo y nadie nos lo reprochó. Fue luego cuando se estropeó esto un poco. Para nosotros, el proceso unitario que se había desarrollado en aquella ocasión era también fuente de ilusiones. Pero nos expresamos mal en los debates que siguieron. Teníamos razón sobre el fondo pero lo explicamos mal. Es lo que nos aisló. Intentamos hacer comprender que no había relación entre el frente realizado para el referendum y el frente que había que reunir para las presidenciales, al no ser el contenido el mismo. Es precisamente ahí donde veíamos una diferencia de naturaleza entre un no a una política liberal y un sí por una política anticapitalista.

¿Cómo aparecía esta diferencia concretamente en el debate?

A. Krivine: En los comités por el no, hubo una deriva progresiva sobre el tema: “Si tenemos un candidato unitario, tendremos un resultado de dos cifras en las presidenciales, etc.” Este planteamiento no tenía en cuenta, en nuestra opinión, las correlaciones de fuerzas. Concentramos entonces nuestra reflexión y nuestras intervenciones sobre un punto que puede parecer secundario en otras épocas u otros países, es la actitud en relación al partido socialista y las instituciones. Comenzamos la batalla a partir del otoño de 2005 en la Conferencia de Saint-Denis de los colectivos antiliberales. El texto propuesto en conclusión contenía la fórmula: “no iremos a un gobierno bajo hegemonía social-liberal”. Conociendo al partido comunista, particularmente, sabíamos que eso podía querer decir todo y su contrario. Propusimos pues la fórmula: “un gobierno bajo hegemonía del partido socialista”. Eso fue el crack. El PC hizo de ello un casus belli, diciendo que se iría si se hablaba del PS. Es ahí donde, probablemente, nos hicimos comprender mal. Pues no tuvimos en cuenta el hecho de que, para la mayoría de los miembros de los colectivos, había un signo de igualdad entre social-liberalismo y PS. Nuestra posición les era pues incomprensible. Eso fue el comienzo de la ruptura. Pero nuestra intuición iba a confirmarse cuando se hizo evidente que el término social-liberal era un cajón de sastre tal que F. Hollande iba a desmarcarse de él (como iba a hacerlo respecto al blairismo, por otra parte). Este episodio y nuestra argumentación mal ajustada hicieron que comenzáramos desde entonces a estar aislados. Abandonamos poco a poco el colectivo nacional. El movimiento luego se ha deshilachado, particularmente cuando hubo diversas proposiciones de candidaturas, entre ellas, para acabar, la de José Bové. Tenemos mucho respeto por él como dirigente sindical. Pero en el plano político, ¿cómo olvidar que en las elecciones europeas de 2004, había llamado a votar por Francis Wurtz, candidato comunista, en París, por el socialista Georges Frêche en Montpellier y por el Verde Gérard Onesta en Toulouse?. Por no hablar de la “misión” que Ségolène Royal le proponía entre las dos vueltas de la elección presidencial y que aceptó. Hay que decir que ahí, no hemos sido comprendidos en absoluto, mucha gente nos decía: “Por lo menos, podríais aceptar a José Bové… “. Decidimos pues presentar a Olivier Besancenot, a la vez que decíamos: “si hay un acuerdo político, le retiramos”.

¿Cómo explicar a posteriori el fracaso de la candidatura única?

A. Krivine: Mucha gente pensó que el fracaso estaba ligado a un asunto de ego. No lo creo en absoluto. Había un verdadero desacuerdo político, lo que el PC por otra parte no ponía en discusión. Es toda la cuestión de la izquierda de la izquierda y de las relaciones con el PS. Para nosotros, hay dos izquierdas en nuestro país, de hecho desde el congreso de Tours en 1921. Pueden actuar conjuntamente pero no estar juntas en un mismo partido o en el gobierno. Otros dicen al contrario: “hay una sola izquierda y hay que sacarla de la senda liberal”.

¿En qué os parece propicio el período para la creación de un nuevo partido?

A. Krivine: Pensamos que hay una acumulación de condiciones que pueden revelarse favorables. Está en primer lugar el ataque sin precedentes de la derecha y de la patronal, una verdadera guerra social que subleva a la gente. Existe luego una voluntad de resistencia social, en Francia y otras partes. En fín, el movimiento social está cada vez más huérfano de salida política. Los partidos tradicionales de la izquierda van hacia la derecha, incluso a nivel europeo. La base de su acuerdo político es el hecho de que aceptan todos la economía de mercado. Personalmente, no veo diferencia entre los dirigentes del partido socialista francés. Votan los mismos textos internos, incluso Jean-Luc Mélenchon. Lo que muestra por otra parte que la tomas de posición en el seno del partido socialista a favor del no en 2005 ya están superadas. Para nosotros la deriva hacia el social-liberalismo es ineluctable en el seno del partido socialista. Si la evolución se ha producido más tarde que en los demás partidos socialistas europeos, es únicamente a causa de las relaciones de fuerza en Francia, principalmente de la fuerza del partido comunista, etc. Pero con Marie-George Buffet en el 1,8%, ¡ya no hay obstáculo!

Para nosotros, el fondo del problema es el siguiente: con la mundialización y los patronos que no dan ya nada, las reformas en el sentido tradicional no son ya posibles. Si la social-democracia en tanto que fuerza reformadora no quiere desaparecer, debe pues imperativamente adaptarse a la nueva situación. Lo que abre un lugar a una nueva izquierda, radicalmente anticapitalista. Con el hundimiento del partido comunista, la situación está pues madura para la construcción de un nuevo partido, que no se llamará por supuesto NPA. Es, en resumen, la base de nuestra reflexión.

¿Han tenido las experiencias extranjeras una influencia en vuestra reflexión?

A. Krivine: Nos empujan a ir aún más lejos, en el mismo sentido. Toda una parte de la izquierda anticapitalista en el mundo toma la misma opción que nosotros. Otros han hecho otra opción. Tomo ejemplos tan diferentes como Bertinotti en Italia, que lo ha pagado muy caro en las últimas elecciones, o Lula en Brasil. Se habla mucho de Die Linke en Alemania. Es efectivamente una buena cosa en el contexto alemán, pero en Francia, sería una regresión. La mayoría de Die Linke viene del partido comunista del este alemán, que era más bien estalinista. Está dispuesta a moverse hacia el reformismo, en cuanto el SPD le tienda la mano. Esto ha ocurrido así efectivamente en Berlín, donde la coalición PDS/SPD ha privatizado sin freno. De ahí nuestra insistencia en la necesidad de romper con esas prácticas. Es lo más importante. Hoy, no tendría sentido poner por delante el trotskismo.

Programa, movilizaciones, independencia respecto a las instituciones, ¿cuáles son las grandes líneas del programa que será propuesto para el nuevo partido y como ponerlo en marcha?

A. Krivine: Hay en primer lugar un acuerdo con las reivindicaciones esenciales del mundo del trabajo. Contrariamente a la izquierda tradicional, no planteamos en primer lugar la cuestión de saber si las medidas que preconizamos son integrables en la economía de mercado. Ponemos el acento primero en lo que es indispensable: el SMIC (salario mínimo) a 1.500 euros, 300 euros para los jubilados, las cuestiones de medio ambiente, las reivindicaciones de las mujeres, etc. Esto da en total una cuarentena de medidas. Segundo aspecto esencial para nosotros: partimos del principio de que estas medidas podrán ser aplicadas si hay movilizaciones y no por la vía parlamentaria. Las hemos cifrado. Lo que dice Olivier Besancenot sobre este tema nunca ha sido puesto en cuestión.

Hay pues ,a nuestros ojos, ruptura en términos de contenido de las medidas, de la importancia concedida a las movilizaciones, y, tratándose de estrategia política, independencia en relación a las instituciones y al partido socialista. Quisiéramos actuar con el PS pero no aceptamos participar en un gobierno con él, ni siquiera en la gestión de las ciudades. Este punto está por otra parte en debate con personas, Clementine Autain por ejemplo, que están sin embargo muy interesadas por nuestro planteamiento.

Está finalmente la idea de “revolucionar la sociedad”. Nuestras medidas atacan en efecto al capitalismo pero esto no basta, la sociedad debe cambiar también.

Esto constituye la base de nuestro proyecto. Todo lo demás se puede discutir, incluso la idea de participar en un gobierno. No estamos en contra si eso se hace sobre una base clara: un acuerdo sobre la necesidad de la ruptura, sobre el hecho de que hay que apoyarse en las movilizaciones. Lo que supone que haya movilizaciones. En la correlación de fuerzas actual, ese no es el caso, está pues excluido que vayamos al gobierno. Si se estuviera en una situación comparable a mayo 68, sería diferente.

Hoy influimos bastante más estando en el exterior. ¡Prueba de ello es el hecho de que el PS ha creado una comisión para estudiar la forma de resistir a Besancenot!. Ciertamente, se nos podrá decir que esto evita la cuestión de la toma del poder. Pero quienes han ido ahí, el partido comunista en Francia o Fausto Bertinotti en Italia, ¡han perdido todo!. No se puede pues ser más que contestatario en las condiciones actuales. Pero, incluso en esta postura, hay que ser radical, en caso contrario también se pierde.

La importancia de la formación política. Habláis mucho del reagrupamiento de militantes de diversas tradiciones o culturas políticas... Cómo hacer un partido eficaz con corrientes muy diversas, tradiciones de lucha, culturas diferentes. ¿No hay un riesgo de nivelación?

A. Krivine: Hay experiencias, más o menos exitosas, como el Bloque de izquierdas en Portugal, la Alianza roja y verde en Dinamarca. En esos casos, se trata al principio de coaliciones de corrientes políticas organizadas. Tenemos una ventaja: no hay ninguna corriente nacionalmente organizada en el NPA. No "negociamos" pues con una corriente sino con militantes. Habrá algunos centenares de comunistas, ex-maos, etc. Pero estarán completamente desperdigados. La masa de la gente interesada (10.000 contra 3.000 miembros de la LCR) no está constituida por militantes (algunas centenas de personas muy politizadas, comunistas, ecologistas, antiguos miembros del comité Bové) sino por gente nueva, con la que no tenemos ninguna experiencia. Están "a fondo contra Sarkozy", quieren "luchar contra Sarkozy", dicen: "la izquierda, eso ya no existe. Al mismo tiempo dicen: "Olivier, tienes que ir al gobierno para mandar a paseo a toda esa gentuza". En lo de la participación gubernamental, no están ni a favor ni en contra. O están por que se vaya, pero sin los socialistas. En los e-mails, cuentan su situación y mantienen al mismo tiempo este discurso. Es completamente nuevo para nosotros. Están dispuestos a entrar en un partido pero nadie sabe cómo van a militar. En Saint-Denis, por ejemplo, somos 30 en la Ligue, pero hay 80 personas alrededor del NPA. Hacemos reuniones de 60 o 65. El problema, va a ser la formación política, incluso si muchas de esas personas tienen una experiencia militante".

¿Cómo veis esta formación política?

A. Krivine: Pensamos que es precisa una formación política, en una preocupación de democracia, para poner a la gente en igualdad de condiciones. En la LCR nos decimos: "los militantes deben tener los medios políticos de echar a la dirección". Sin embargo, aquí vamos a ver lo que yo no he conocido nunca, niveles políticos muy diferentes. No tememos tener una oposición cuando adoptemos el programa, cuya base está ya en debate en los comités de iniciativa. Lo que nos planteará problemas, eventualmente, no son los izquierdistas que querrían invadirnos sino los deslizamientos a la derecha de personas poco politizadas. Bastará con explicarse pues no son grupos organizados.

¿Estará asegurada la formación por los antiguos de la Liga?

A. Krivine: Al comienzo, ciertamente. Esto comenzará con la universidad de verano que, este año, será NPA/Liga. Tendremos otros problemas con la llegada de "personalidades" que no imaginan ciertamente no estar en la dirección. ¡Es sin embargo lo que querríamos evitar!. Pensamos más bien en gente pegada al terreno, representativos del movimiento social, que se han dado a conocer en las luchas. Las personalidades tendrán más bien su lugar en los comités de estudios que pondremos en pie. Como lo que queda de los colectivos antiliberales se ha dividido, algunos vendrán a nosotros. Ocurrirá lo mismo en el partido comunista. Pero no queremos hacer un partido que sea un ensamblamiento de personalidades. Los "generales sin tropa", los hemos experimentado durante la campaña por el "no" y ya hemos visto lo que eso ha dado de sí.

Dicho esto, lo repito, vamos un poco a la descubierta. Hay una parte muy empírica en lo que hacemos, avanzamos un poco a tientas. La reunión de los comités a fines de junio constituirá un test. Nadie tendrá mandato, cada cual intentará ver quien es quien. No ocultamos evidentemente el hecho de que es la LCR la que ha convocado la reunión. Pero intentamos actuar de forma que en los comités de iniciativa, la LCR no sea mayoritaria. Vamos hacia un comité de pilotaje nacional para preparar un congreso con la misma idea: solo la mitad de los miembros serán de la LCR. El resto vendrá del movimiento social, esencialmente de los no organizados hasta ahora, representando a las luchas sociales. El congreso está previsto para diciembre o enero. Cuando tenga lugar, disolveremos la LCR antes, es una decisión ya tomada.

Un verdadero partido político. ¿No es una apuesta arriesgada? ¿La cuestión de la organización parece en efecto central, como muestran los problemas de un movimiento como Attac?

A. Krivine: Hay una diferencia: construimos un partido político, con un programa. Pero no niego que tenemos un problema político, incluso con miembros de la LCR que querrían que el futuro partido no tuviera estatutos. Hay pues que explicarse. De otro lado, desde hoy, mucha gente con la que hablamos quiere adherirse a un partido, con estatutos, tener un carné.

La LCR ha cambiado mucho ya. Nuestros nuevos miembros, jóvenes, son muy "rebeldes y poco politizados". He oído, caso extremo, a un joven preguntar: "¿pero quien es ese Marx del que todo el mundo habla?". De ahí la necesidad para nosotros de una educación verdaderamente de base".

¿Cómo toma forma concreta el proceso de creación?

A. Krivine: Esencialmente, por el trabajo de los comités de iniciativa. Ahí donde existen, espaciamos las reuniones de la LCR. Los comités tienen una oficina. Tienen temas de discusión y hacen comisiones para profundizar cuestiones como la inmigración, el servicio público, etc. Sacan panfletos, etc. Estos comités son heterogéneos, algunos de sus miembros tienen una formación, otros se interesan sobre todo por la "próxima pegada de carteles". Estos comités interesan a muchos "decepcionados" de diverso tipo, incluidos decepcionados de Attac, preocupados de salir de los lugares donde había sobre todo "viejos que discuten". Olivier Besancenot atrae a muchos jóvenes. Somos conscientes de la debilidad que esto puede constituir. Olivier es ,por otra parte, el primero que rechaza el fenómeno de "starización", mantenido por los medios. ¡Pero es una batalla permanente! La tele plantea un problema particular a todos: o bien no se va, lo que es difícil hoy, o bien se va con la idea de "darle la vuelta", lo que Olivier hace muy bien rechazando particularmente toda intrusión en su vida personal.

¿Cómo hacer con tan pocos cuadros, en el momento en que el pensamiento general es la antidelegación, la democracia participativa, el consenso? ¿La cultura de organización de los militantes actuales de la LCR va a difundirse espontáneamente?

A. Krivine: No tenemos la intención de ceder al aire del tiempo. El núcleo constituído por los militantes de la LCR es una garantía. Queremos hacer un partido de militantes, no un partido de adherentes, incluso si el militantismo ha evolucionado. Por ejemplo, vamos a bajar las cotizaciones, manteniendo la idea de que la adhesión debe traducirse en un esfuerzo, incluso financiero. Pero las cotizaciones son relativamente elevadas en la LCR, lo que no corresponde quizá ya a lo que son los militantes de hoy. Pensamos, en el nuevo partido, proseguir una verdadera actividad de partido con, por ejemplo, reuniones regulares y bastante frecuentes. ¡Lo que no se hace ya casi en otras organizaciones!".

Traducción de Alberto Nadal

Nueva Constitución para Ecuador


Decio Machado / Diagonal

Tras la consulta popular para la aprobación de la nueva Constitución, Ecuador y en especial la ciudad de Guayaquil muestran una clara polarización social sin precedentes en el país.

La campaña del referéndum constitucional ha tenido un elevado tono de enfrentamiento durante los meses de agosto y septiembre en Ecuador. A pesar de que el ex presidente Lucio Gutiérrez, principal figura de la oposición a nivel nacional, anunciara sospechas de fraude en el referéndum, el propio jefe de la misión de observadores internacionales de la OEA, Enrique Correa, lo desmintió públicamente: “No existen indicios de fraude electoral en el Ecuador, aunque sí hemos asistido a una campaña basada en la lógica de la confrontación basada en la descalificación del contrario”.

El 28 de septiembre, el proceso de transformación social que vive Ecuador, conocido popularmente como la “revolución ciudadana”, se jugaba el todo por el todo. Con la aprobación de la Constitución se pone en marcha uno de los catálogos de derechos más extensos del mundo, con sus correspondientes garantías, que llevan a convertir incluso a la naturaleza en sujeto de derecho, algo hasta ahora insólito en los tratados constitucionales.

Esta nueva Constitución sienta las bases para una democracia participativa, con la posibilidad, por poner un ejemplo, de poder destituir al jefe de Estado por votación popular. El texto incorpora derechos fundamentales entre los que destaca el derecho al agua, a la alimentación, los derechos de las mujeres embarazadas, de los adultos mayores o de los pueblos indígenas.

La nueva Constitución de Ecuador rescata un término kichwa, el sumak kawsay (traducido al castellano como “el buen vivir”), y lo convierte en el principal objetivo del poder público. Horas antes de que se abrieran las urnas, el presidente Rafael Correa definía la situación por la que pasa el país : “Estamos ante un momento histórico. Es una oportunidad maravillosa para construir el nuevo Ecuador, por el que hemos venido luchando durante muchas generaciones”. De igual manera declaraba a DIAGONAL Manuela Gallegos, titular de la Secretaría de Pueblos, Movimientos Sociales y Participación Ciudadana: “No tiene viabilidad el proyecto de transformación social que se está desarrollando en el Ecuador si el pueblo no aprobase la Constitución. Por fin las minorías étnicas se ven reflejadas en la carta magna en toda su magnitud. Por fin las mujeres, los indígenas, los negros…, se empoderarán. Este proceso de cambio ya no tiene freno”.

Las élites, intranquilas

La Iglesia ha sido uno de los actores claves de la oposición durante la campaña por el ‘no’ a la Constitución. Monseñor Arreguí, cura de origen vasco y miembro destacado del Opus Dei, así como presidente de la Conferencia Episcopal Ecuatoriana, se manifestó claramente en contra de la Constitución. Sus motivos: “Esta Constitución atenta contra los principios de la Iglesia. Es abortista, da pie al matrimonio entre parejas del mismo sexo, y en su preámbulo invoca el nombre de Dios junto al de la Pachamama”. De igual manera, manipulando y tergiversando los contenidos del proyecto constitucional, la oligarquía y extensos sectores empresariales llamaban a votar por el ‘no’, indicando a través de múltiples vocerías que la nueva Constitución atenta contra el principio de la propiedad privada, que es comunista, que se ha hecho a través de asesores extranjeros financiados por el presidente venezolano Hugo Chávez, que no permitirá las inversiones extranjeras en el país... Walter Larrea, trabajador de la cadena comercial AKI, con múltiples establecimientos en diversas ciudades de Ecuador, declara a DIAGONAL: “En nuestros puestos de trabajo, nuestros jefes nos amenazaron con el despido si votábamos ‘sí’ a la Constitución. Mi hermano y mis primos, que trabajan en negocios que nada tienen que ver con el mío, también fueron amenazados”.

Ecuador se ha caracterizado por ser un país razonablemente tranquilo, a pesar de que Rafael Correa sea el sexto presidente de la República en tan solo 12 años. Muchos de sus antecesores fueron derrocados por movimientos populares, así como por procesos judiciales. Según declara a DIAGONAL el sociólogo Jon Avatares: “La sociedad ecuatoriana se ha caracterizado por no haber vivido grandes procesos de represión política, los militares no protagonizaron dictaduras del estilo de las que existieron en el Cono Sur, y el nivel de enfrentamiento político ha tenido habitualmente un perfil relativamente bajo dentro del contexto social”. Y prosigue: “Sin embargo esto está cambiando, la campaña para el referéndum constitucional es un claro ejemplo de ello. Nuestra sociedad se está polarizando entre quienes están a favor o en contra de Correa, y este fenómeno se da de manera especial en Guayaquil”.

martes, 7 de octubre de 2008

Ivo Maldonado; Biblioteca Viva Mall Plaza Trébol












Denuncia social y emotividad invadió la sala de la Biblioteca Viva de Concepción (Chile) el sábado 4 de octubre
“Me harté de hartarme”…”me prostituí en un código del trabajo”…”tengo ganas de un cuerpo perfecto recostado en mis ojeras”…”mi hija aprendió a cazar mucho antes que los dinosaurios”… son algunas de los extractos de “Los besos de Judas” o “Canción de un traidor”, libro inédito que el poeta penquista Ivo Maldonado dio a conocer el sábado 4 de octubre en la Biblioteca Viva.
Sin duda los versos y frases cargadas de denuncia social y de emotividad lograron tocar la fibra de los asistentes al encuentro, en que literalmente a muchos se les “cayeron las lágrimas” sobre todo con el poema Lourdes, el cual el poeta dedicó a su hija.
Pero no sólo de nostalgia vive el escritor, ya que aparte de dar a conocer su más reciente creación, Maldonado puso su cuota de carisma al brindar la posibilidad a los presentes de manifestar sus inquietudes o sentirés respecto de la temática de su nuevo hijo literario.
Sin duda la sorpresa del evento fue la presentación en sociedad de la joven promesa de la poesía coronelina, el pequeño Héctor Molina de 10 años, quien hizo las veces de telonero de Maldonado, recitando sus poemas impregnados de pureza. Sentimientos infantiles que cautivaron al público que ese día llenó la sala de la Biblioteca Viva.
Uno de los más felices era el director del liceo, donde estudia el pequeño, quien al final de la sesión agradeció a Ivo Maldonado por haber invitado a Héctor a leer. Así culminó una jornada que de seguro será inolvidable para el menudo y gran poeta de las tierras del carbón.
(Por Paula Villanueva, periodista)

jueves, 2 de octubre de 2008

DIAGNOSTICO DE AGOTAMIENTO DEL CAPITALISMO

¿Se acabó el neoliberalismo?
martes, 30 de septiembre de 2008

El capitalismo, sucediendo al modelo regulador keynesiano o del bienestar social, como se lo quiera llamar. Hizo su diagnóstico de agotamiento del modelo anterior y se propuso reorganizar el sistema capitalista en su conjunto, de acuerdo a sus principios liberales reciclados para el nuevo período histórico del capitalismo.

Fue un modelo absolutamente hegemónico, logrando extenderse de la forma mas universal posible: de Europa Occidental a los Estados Unidos, de América Latina a China, de Europa Oriental a África, de Rusia al sudeste asiático. Tuvo crisis precoces – a lo largo de la década del 90, en México, en el sudeste asiático, en Rusia, en Brasil, en Argentina – pero se mantuvo hegemónico, sin ningún otro proyecto alternativo que le disputase hegemonía.

Suscitó grandes movilizaciones de oposición – como las iniciadas en Seattle, que desembocaron en los Foros Social Mundiales -, siguió tropezando, como en la OMC, en el debilitamiento del FMI y del Banco Mundial, pero continuó siendo el único modelo globalizado. Después de algún tiempo, la propuesta híbrida de China permitió que surgiera la expresión Consenso de Pekin, en lugar del de Washington, pero girando siempre en torno a las adecuaciones de las políticas de libre comercio.

Algunas potencias centrales del capitalismo ya habían sido víctimas de la desregulación y del poder de ataque del capital especulativo, entre ellas Gran Bretaña, en la década del 80, víctima del mega-especulador George Soros. Pero todo ataque especulativo tenía a los Estados Unidos como beneficiario, toda fuga de capitales tenía la Bolsa de Valores de Nueva York como refugio. Se sabía que esa parranda especulativa sólo podría encontrar un límite en el momento en que el principal beneficiario de ella fuese también su víctima. Ese momento llegó.

Las medidas de emergencia, como siempre, hieren la doctrina neoliberal, con intervenciones directas y masivas del Estado – como ya venía sucediendo desde la primera crisis neoliberal, la de México en 1994. Pero... ellas significan el fin del neoliberalismo? Es posible reanudar procesos regulatorios globales – un nuevo Bretton Woods - que frenen estructuralmente la libre circulación de capitales y reviertan los procesos de desregulación económica, esencia misma del neoliberalismo?

Nada indica que esto sea posible. No existe una lógica racional del sistema capitalista, que haga que sus agentes – desde las grandes corporaciones a los Estados dominantes – actúen de acuerdo a una lógica superior del sistema. Esa es una de sus contradicciones estructurales, aquella que existe entre la dominación global y la apropiación privada.

Se trata de una gran crisis capitalista, ya se dice que es la mayor desde 1929, que puede abrir camino a la construcción de un modelo alternativo. Pero por ahora no se vislumbra ningún modelo que pueda tener ese papel, ni siquiera de manera embrionaria. En el horizonte, hay como máximo versiones híbridas, como las políticas económicas de China o Brasil. La propia proliferación de gobiernos conservadores ( nada innovadores siquiera en sus políticas) en el centro del capitalismo, indica que nada de nuevo puede surgir de ellos en sustitución del modelo agotado.

Todo indica por lo tanto que, entre la crisis del modelo precozmente envejecido y las dificultades de surgimiento de uno nuevo, mediará un período mas o menos prolongado de inestabilidades, de sucesión de crisis, de turbulencias. Porque lo que se agota no es solo un modelo hegemónico, sino también la hegemonía política de los Estados Unidos – los dos pilares de sustentación del nuevo período político, que sustituyeron al modelo regulador y a la bipolaridad mundial. Y también en este plano, no surge en el horizonte una nueva potencia o un conjunto de ellas, en condiciones de ejercer una nueva hegemonía.

El neoliberalismo no termina, pero se agota, abriendo un período de disputa por alternativas, entre las que por ahora solo se ve América Latina, donde han aparecido propuestas de superación. La región gana de este modo un protagonismo – junto con China – en la proyección del futuro del mundo en toda la primera mitad del nuevo siglo, en la disputa entre lo viejo que se resiste a morir y produce crisis y sus consecuencias por todos lados, y lo nuevo, que comienza a anunciar el post neoliberalismo, un mundo solidario, desmercantilizado, humanista, de que lo que el Forum Social Mundial de Belém – del 27 de enero al 1° de febrero – será una muestra pluralista y vigorosa de las alternativas al neoliberalismo.
por Emir Sader
* Fuente: Rebelión